sábado, 18 de diciembre de 2010

Un libro revela la conexión de la droga con santería y brujería


Los narcotraficantes no practican realmente la religión cristiana


MÉXICO, viernes 17 de diciembre de 2010 (ZENIT.orgEl Observador).-


Con motivo de la publicación del libro “La fe de los sicarios” del presidente de la Asociación de Analistas Católicos de México, el periodista Carlos Montiel, autor del texto, platicó con Zenit-El Observador sobre cómo se relaciona el narcotráfico con la santería y la brujería y no con la Iglesia católica ni con la religión cristiana, como muchos medios de comunicación mexicanos han querido hacer ver a los lectores.

--¿Qué características tiene la religiosidad de la mayoría de los narcotraficantes?

Carlos Montiel: Los jefes del narcotráfico mantienen una falsa adhesión a la fe católica, cuando destruyen al contrario sin mirar el prejuicio que ocasionan a la célula familiar y al componente social. En específico, los sicario manifiestan un vínculo devocional con santos católicos y cultos como prácticas ritualistas del ocultismo, al profesar la devoción a la “santa” muerte, al “santo” Jesús Malverde, hasta culminar en la magia, santería, brujería y satanismo.

--¿Qué implica el culto a la Santa Muerte?

Carlos Montiel: Una práctica de la cultura de la muerte, debido a la maldad de sus ritos, un culto que ha incrementado casos de posesión demoníaca que culminan en cuestiones satánicas. Se le atribuye una relación estrecha con la brujería y el satanismo, principalmente por su culto esotérico. La celebración de sus misas negras va dirigida a la protección de sicarios, narcos, custodios, ladrones, secuestradores, prostitutas, policías y extorsionadores.

--¿Qué relación hay entre santería y narcotráfico?

Carlos Montiel: Algunas organizaciones criminales de tráfico de drogas ávidas de poder, se acercan a sectas de magia negra que realizan rituales o sacrificios con seres humanos, para blindar a sus narcotraficantes o sicarios. Otras, son “santificadas” con rituales de brujería totalmente espeluznantes. Recurren a la santería para solicitar blindaje contra sus enemigos.

En la frontera entre México y los Estados Unidos prolifera la brujería satanista, la santería, el vudú, y cultos sacrificiales como la “santa” muerte.

Los policías han recurrido a rituales que mezclan vudú haitiano, santería cubana, y brujería local. En los ritos, brujos o santeros aprovechando noches de luna llena sacrifican pollos rociando su sangre sobre los policías con el fin de conseguir protección contra los sicarios. Incluso, policías de Tijuana optan por tatuar su cuerpo con símbolos de vudú, como blindaje contra las balas, el cual tiene un precio de aproximadamente 160 dólares.

- ¿Las bandas criminales han puesto en peligro la vida de sacerdotes y laicos comprometidos?

Carlos Montiel: Los sicarios han trastocado a la institución divina, considerando como sus enemigos a miembros de la jerarquía eclesial, principalmente por el interés de estos últimos en difundir la cultura de la vida, los valores de lo familiar y social, la paz y el perdón. Han llegado a extorsionar a sacerdotes con la solicitud de 5 mil a 10 mil pesos semanales, mismos que fueron recaudados por las limosnas. Como resultado, los sacerdotes han tenido que ser cambiados a otras diócesis. Debido al clima de violencia, ejercer el ministerio sacerdotal es un riesgo latente en diversas provincias de México, en Oaxaca, Sinaloa, Chiapas, Guerrero, Veracruz, Aguascalientes, Jalisco, Hidalgo, Michoacán, Durango, Coahuila, Chihuahua, Estado de México y el Distrito Federal.

México es campo minado en el que predicadores y líderes sociales pueden verse alcanzados por la existencia de más de 130 células de la delincuencia organizada.

Por lo anterior, los sicarios son considerados enemigos de la fe cristiana; y quien mata o amenaza a representantes de Cristo en la tierra, son hijos de las tinieblas.

--¿”Santa muerte” y santería se relacionan con prácticas satánicas?

Carlos Montiel: Buscar lograr conocimiento o poderes sobrenaturales fuera de Dios, pretendiendo saber y dominar los secretos de la naturaleza, lleva a los sicarios como a capos, a manifestar un tácito rechazo a Dios sin importar que lo oculto sea un canal por el cual Satanás tome posesión de las personas. Es peligrosa la práctica y culto a la muerte como la santería porque puede pasar de la parafernalia del terror (estética maléfica) a los cultos satánicos. Estos ritos, exigen que el practicante vacíe su mente e invite a espíritus extraños a controlar su intelecto y cuerpo, lo que causa la esclavitud por una posesión demoníaca.

--¿Está relacionado el narcotráfico con ultrajes a templos y a hostias consagradas?

Carlos Montiel: Aunque las profanaciones a templos católicos y tumbas al extraer los cuerpos; tal como lo realizan practicantes de brujería con el fin de completar sus ritos para proteger a sus adeptos; son producto de una conexión brujeril y satánica, no podemos unificar el problema, ambos mantienen dos objetivos a alcanzar distintos.

--Como católicos ¿qué podemos hacer?

Carlos Montiel: Iniciar en cada diócesis del país, particularmente quienes sufren el problema del narcotráfico, la campaña lanzada en la ciudad de Querétaro (México) que consiste en colocar en la puerta de cada hogar un moño blanco que envía el mensaje: “este hogar está a favor del Dios que es vida y no de la muerte”; y finalmente propagar la devoción a San Benito, de gran utilidad para alejar el mal que padece el país a causa de la violencia.

Nota: Una copia del texto se puede encontrar en consejodeanalistas@hotmail.com

Por Omar Árcega

martes, 14 de diciembre de 2010

Cardenal Cañizares: La falta de fe, la mayor amenaza para nuestro tiempo


En su investidura como “honoris causa” por la Universidad Católica de Valencia


VALENCIA, viernes 10 de diciembre de 2010 (ZENIT.org).-


“La falta de fe en Dios, la pérdida del sentido de Dios que lacera nuestro mundo, las percibo y vivo como la indigencia mayor, la amenaza más grave y de más desastrosas consecuencias para nuestro tiempo”, a la vez que “genera una quiebra moral que reclama urgentemente su reedificación”.

Lo dijo el cardenal Antonio Cañizares, prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, al recibir el doctorado honoris causa por la Universidad Católica de Valencia San Vicente Mártir, este jueves en el aula magistral del Palau de les Arts Reina Sofía de Valencia.

En su discurso de investidura, aseguró que “no hay nada que me haga sufrir tanto ni me preocupe más que la crisis de Dios que padece la humanidad contemporánea, la ausencia de Dios, camuflada a veces incluso en una religiosidad vacía”.

El purpurado tituló su discurso En defensa del hombre y de la vertebración de la sociedad: la actuación de un obispo, informó la Universidad Católica de Valencia.

En él, hizo un llamamiento a la esperanza desde el reconocimiento realista de lo que sucede. Se mostró convencido de que “si bien, para una sociedad como la nuestra, cerrada al futuro, faltan fundamentos para la esperanza, Dios no la dejará en la estacada”.

Por ello, continuó, “me urge ser testigo y portavoz de esperanza, alentar la esperanza, mirar al futuro, ayudar a abrirse al futuro y señalar caminos que conduzcan a él”.

“Lo que los cristianos podemos y debemos ofrecer al mundo, a la sociedad, es la Buena Noticia de la Encarnación-Redención de Cristo y la verdad del hombre que se desvela y verifica en la experiencia de ese acontecimiento, vivida en la comunión de la Iglesia”.

“Ésa es toda nuestra riqueza, y hemos de ofrecerla con tanta sencillez como transparencia, sabedores por la propia experiencia de que es un bien inestimable y decisivo para la vida de las personas”, añadió.

El purpurado concluyó indicando que “todas las corrientes del pensamiento de nuestro viejo continente deberían considerar a qué negras perspectivas podría conducir la exclusión de la vida pública de Dios como último juez de la ética y supremo garante contra todos los abusos de poder ejercidos por el hombre sobre el hombre”.

Precisamente “en esta fe radica, en último término, la aportación de la Iglesia a la necesaria vertebración de la sociedad”, añadió.

Autoridades

En el acto de distinción al cardenal Cañizares, participaron diversas autoridades civiles, entre ellas el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, la presidenta de las Cortes Valencianas, Milagrosa Martínez y el líder de la oposición autonómica, Jorge Alarte.

También asistieron nueve obispos y arzobispos y el cardenal Agustín García-Gasco, arzobispo emérito de Valencia.

La ceremonia estuvo presidida por el arzobispo de Valencia y gran canciller de la Universidad Católica de Valencia, monseñor Carlos Osoro, quien destacó la importancia de defender la verdad del hombre y su dignidad.
Por su parte, Francisco Camps afirmó que en las sociedades del siglo XXI es esencial “el respeto, la tolerancia y la libertad de los ciudadanos y de su dignidad como personas para asegurar la convivencia y el bien común”.

El presidente de la Generalitat Valenciana también se refirió al cardenal Cañizarse como a “un valenciano ejemplar que ha consagrado su vida a la impagable labor de transmitir valores y enseñanzas esenciales para la sociedad valenciana de hoy y las próximas generaciones”.


Y añadió que “cualquier persona responsable defiende la compatibilidad entre la Iglesia y la sociedad o entre la vida pública y la fe, como también entre la ciencia y la religión o entre los conocimientos y los valores”.

sábado, 11 de diciembre de 2010

Oración a la Virgen de Guadalupe




¡Oh Virgen Inmaculada, Madre del verdadero Dios y Madre de la Iglesia! Tú, que desde este lu gar manifiestas tu clemencia y tu compasión a to dos los que solicitan tu amparo; escucha la ora ción que con filial confianza te dirigimos y presén tala ante tu Hijo Jesús, único Redentor nuestro.

Madre de misericordia, Maestra del sacrificio escondido y silencioso, a ti, que sales al encuentro de nosotros, los pecadores, te consagramos en este día todo nuestro ser y todo nuestro amor. Te consagramos también nuestra vida, nuestros tra bajos, nuestras alegrías, nuestras enfermedades y nuestros dolores.

Da la paz, la justicia y la prosperidad a nuestros pueblos; ya que todo lo que tenemos y somos lo ponemos bajo tu cuidado, Señora y Madre nuestra.

Queremos ser totalmente tuyos y recorrer con tigo el camino de una plena fidelidad a Jesucristo en su Iglesia: no nos sueltes de tu mano amorosa.

Virgen de Guadalupe, Madre de las Américas, te pedimos por todos los Obispos, para que con­duzcan a los fieles por senderos de intensa vida cristiana, de amor y de humilde servicio a Dios y a las almas.

Contempla esta inmensa mies, e intercede para que el Señor infunda hambre de santidad en todo el Pueblo de Dios, y otorga abundantes vocacio nes de sacerdotes y religiosos, fuertes en la fe, y celosos dispensadores de los misterios de Dios.

Concede a nuestros hogares la gracia de amar y de respetar la vida que comienza, con el mismo amor con el que concebiste en tu seno la vida del Hijo de Dios. Virgen Santa María, Madre del Amor Hermoso, protege a nuestras familias, para que estén siempre muy unidas, y bendice la edu cación de nuestros hijos.

Esperanza nuestra, míranos con compasión, enséñanos a ir continuamente a Jesús y, si cae mos, ayúdanos a levantarnos, a volver a él, me diante la confesión de nuestras culpas y pecados en el Sacramento de la Penitencia, que trae so siego al alma.

Te suplicamos, que nos concedas un amor muy grande a todos los santos Sacramentos, que son como las huellas que tu Hijo nos dejó en la tierra.

Así, Madre Santísima, con la paz de Dios en la conciencia, con nuestros corazones libres de mal y de odios podremos llevar a todos la verdadera ale gría y la verdadera paz, que vienen de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, que con Dios Padre y con el Espíritu Santo, vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.

JUAN PABLO II

sábado, 4 de diciembre de 2010

Exposición sobre Gaudí y la Sagrada Familia en el Vaticano en primavera

Actividades académicas y culturales difundirán la figura del arquitecto




CIUDAD DEL VATICANO, jueves 2 de diciembre de 2010 (ZENIT.org).-


El Vaticano acogerá la próxima primavera una exposición, una conferencia y un concierto dedicados al arquitecto Antonio Gaudí y a su obra magna, la basílica de la Sagrada Familia de Barcelona.

La iniciativa está impulsada por la Fundación Joan Maragall del arzobispado de Barcelona, la Fundación Junta Constructora del Templo de la Sagrada Familia y la Sociedad Estatal para la Acción Cultural Exterior (SEACEX), a propuesta y bajo los auspicios del Consejo Pontificio para la Cultura.

La exposición Gaudí y la Sagrada Familia de Barcelona. Arte, ciencia y espiritualidad podrá visitarse del 1 de abril al 15 de mayo de 2011 en el Brazo de Carlomagno, en lado izquierdo de la columnata de Bernini en la Plaza de San Pedro.

La muestra “reflejará la importancia monumental y espiritual de la Sagrada Familia”, explica un comunicado de la Fundación Joan Maragall, y está comisariada por Daniel Giralt-Miracle.

Está articulada según un recorrido en seis grandes capítulos: Gaudí y la Sagrada Familia, Otros edificios de Gaudí, Ciencia y tecnología en la Sagrada Familia, Gaudí diseñador de objetos litúrgicos, El mensaje religioso de la basílica y La Sagrada Familia hoy.

A través de este recorrido se situará histórica y artísticamente la figura de Antonio Gaudí, en proceso de beatificación, y su obra, especialmente la Sagrada Familia, de la que se analizarán tanto los aspectos técnicos como artísticos y el mensaje religioso que contiene.

Entre los objetos que se mostrarán, se encontrarán maquetas de la época de Gaudí, planos, muebles y objetos litúrgicos diseñados por el propio arquitecto procedentes de las colecciones del Museo de la Sagrada Familia y de fotografías y audiovisuales.

Para acercar la figura de Gaudí al Vaticano, también está previsto un diálogo entre el presidente del Consejo Pontificio para la Cultura, el cardenal Gianfranco Ravasi, y el arquitecto español Santiago Calatrava, el 12 de abril, sobre el tema Arquitectura y fe / arquitectura y trascendencia.

Más adelante dos ponentes pronunciarán una conferencia sobre Gaudí y su época -en el marco del último tercio del siglo XIX hasta la Primera Guerra Mundial- en la embajada española ante la Santa Sede, en Roma.

Finalmente, el 12 de mayo, un concierto de la escolanía de Montserrat completará las actividades organizadas durante las fechas de la exposición.


domingo, 28 de noviembre de 2010

Recursos en la web para vivir y ayudar a vivir el Adviento

Postal virtual de Red Misión México



ROMA, jueves 25 de noviembre de 2010 (ZENIT.org).-

Ahora es posible prepararse espiritual y cristianamente a la Navidad. Una página ofrece recursos en la Red para orar, reflexionar, encender las velas de Adviento y vivir este tiempo litúgico que se abre a la Esperanza de la llegada de Jesús.

La postal virtual preparada por la Red Misión México, ha sido dada a conocer a ZENIT por Pablo Gómez Gallardo, coordinador de la iniciativa

Red Misión México, a través de su portal de recursos en línea MissionKits.org, ha publicado una postal virtual para este tiempo litúrgico, como ya hiciera para Navidad, Cuaresma y Pentecostés.

Según explica Gómez Gallardo, “esta vez se trata de una tarjeta de Adviento, en la que una persona puede encender semana a semana una de las cuatro velas de la corona, al mismo tiempo que puede escuchar una reflexión en video para cada semana y otra explicando el origen de la corona de Adviento”.

“Creemos –añade- que es muy importante empezar desde ahorita la preparación para la Navidad, y es por esto que no quisimos esperar para enviar una tarjeta de Navidad, que por supuesto lo haremos en su momento”.

La tarjeta en línea tiene muchas ventajas, señala el coordinador de la iniciativa, entre ellas, el poder compartirla fácilmente, ya sea por correo de forma personalizada o por Facebook y Twitter.

También se puede hacer una suscripción para recibir cada semana un recordatorio para encender la siguiente vela, así como imprimir una oración para el rezo en familia.

Una iniciativa que se puede compartir con todos los familiares y amigos, facilitando así la preparación a la buena noticia que se renueva cada año en Navidad.

Enlace a la tarjeta: http://www.missionkits.org/adviento.


sábado, 27 de noviembre de 2010

Benedicto XVI plantea la cuestión de Dios


Por Giovanni Maria Vian


CIUDAD DE VATICANO, sábado, 27 noviembre 2010 (ZENIT.org).- Publicamos el artículo que ha escrito el director de "L'Osservatore Romano", Giovanni Maria Vian, con motivo del último consistorio de creación de 24 nuevos cardenales y de la publicación del libro-entrevista de Benedicto XVI.



* * *

En su tercer consistorio para la creación de nuevos cardenales Benedicto XVI decidió honrar con la púrpura a algunos de sus colaboradores en la Curia romana y a otros obispos "elegidos de las diferentes partes del mundo", que así desde hoy son todavía más cercanos al Sucesor de Pedro, en el servicio único e insustituible que presta a la comunión católica. Según una dimensión colegial que ciertamente no es una novedad en la Iglesia de Roma, pero que se advierte con más evidencia en las reuniones del Colegio cardenalicio -como la que abrió con la oración y la reflexión el consistorio del sábado 20 de noviembre- y, en los últimos decenios, en las numerosas asambleas (ordinarias, extraordinarias y especiales) del Sínodo de los obispos.


Jesús nuestro Señor, Dominus Iesus, encomendó al primero de los Apóstoles -dijo su actual sucesor- el mandato de "reunir a los pueblos con la solicitud de la caridad de Cristo". En una dimensión universal y, por tanto, propiamente católica, según una lógica de gobierno que ciertamente no es la del mundo. Y que, por consiguiente, el mundo a menudo no comprende, al pretender representar a la Iglesia según esquemas y estereotipos, que en general son de escasa ayuda para comprender su verdadera naturaleza. Aunque persistan culpas, imperfecciones y defectos, vinculados de forma inevitable y fatal a todo ser humano y, por eso, también a quien forma parte de la Iglesia.


Así el ejercicio de la autoridad según la palabra de Cristo -la "mentalidad de Dios" dijo el Papa- debe mirar al camino recorrido por el Maestro, que para quien se ha encontrado con él en su vida significa saberse abandonar a la providencia de Dios, según decisiones que "nunca son fruto de un proyecto propio o de una ambición" y que en cambio conllevan la lógica de la cruz. Esto, entre otras cosas, es lo que quiere significar el color de la púrpura, que expresa la disponibilidad a servir al Señor y a su Iglesia hasta el martirio de sangre (usque ad effusionem sanguinis), en comunión con el Sucesor de Pedro.


Y lo que está en juego es realmente importante para todos, muy por encima de interpretaciones políticas o instrumentales. Benedicto XVI lo explicó con sencillez y claridad, el verano pasado, a Peter Seewald en una larga entrevista, publicada ahora en un libro que ya en el título -Luz del mundo- confirma que la mirada de Joseph Ratzinger siempre ha estado dirigida a Cristo, el único que ilumina "al Papa, a la Iglesia y los signos de los tiempos", reza el sugestivo subtítulo. Pablo VI y más tarde, varias veces, Juan Pablo II, ya se habían confiado a intelectuales, escritores y periodistas. Lo mismo hizo el cardenal Joseph Ratzinger en tres ocasiones, suscitando un notable interés editorial y premiando una elección de comunicación eficaz y adecuada a la modernidad, que Benedicto XVI ha innovado luego de modo radical con la obra dedicada a Jesús de Nazaret. No es difícil prever que también este libro -en el cual el Papa se presenta sin ningún fingimiento y sin recurrir a particulares estrategias comunicativas, que en cambio tanto gustan a muchos comentaristas- va a tener una amplia difusión. Y todo el mérito es de Benedicto XVI que sabe plantear, con palabras nuevas y sin eludir ninguna pregunta, sobre todo la cuestión de Dios. Aquel que en Cristo -como subraya con un lenguaje bíblico en la última respuesta a su entrevistador- "vino para que podamos conocer la verdad. Para que podamos tocar a Dios. Para que la puerta quede abierta. Para que encontremos la vida, la vida verdadera, que ya no está sometida a la muerte".


sábado, 20 de noviembre de 2010

Libertad religiosa, liturgia, anglicanos y abusos: Temas de encuentro del Papa con cardenales


VATICANO, 19 Nov. 10 / 09:59 am (ACI)

Con ocasión del Consistorio en el que el Papa Benedicto XVI creará este sábado 20 de noviembre 24 cardenales, se realiza en el Vaticano un encuentro de oración y reflexión con los miembros del Colegio Cardenalicio en el que se tratan cuatro importantes temas: la libertad religiosa en el mundo, la liturgia en la Iglesia hoy, el ingreso de anglicanos a la Iglesia Católica y la respuesta eclesial a los abusos sexuales.

En el aula nueva del Sínodo de los Obispos el Papa Benedicto XVI saludó a los 150 cardenales presentes, entre los que se encontraban los 24 que serán creados cardenales este sábado, a quienes recordó la importancia de anunciar el Evangelio, que en la historia encuentra diversas oposiciones.

"La relación entre verdad y libertad es esencial, pero hoy se enfrenta al gran reto del relativismo, que parece completar el concepto de libertad pero en realidad corre el peligro de destruirla proponiéndose como una verdadera ‘dictadura’. Nos encontramos, por lo tanto en un tiempo de difícil compromiso para afirmar la libertad y anunciar la gran verdad del Evangelio y de los grandes logros de la cultura cristiana", dijo.

Sobre la liturgia el Santo Padre resaltó su importancia fundamental porque en la vida de la Iglesia la liturgia es "el lugar de la presencia de Dios con nosotros".

Después se han afrontado dos temas de discusión: la situación de la "Libertad religiosa en el mundo y nuevos desafíos", con la relación introductoria del Secretario de Estado, Cardenal Tarcisio Bertone, y la "Liturgia en la vida de la Iglesia hoy", con la ponencia del Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, Cardenal Antonio Cañizares Llovera.

El Cardenal Bertone trazó una visión panorámica de los intentos de limitar la libertad de los cristianos en diversas partes del mundo, invitando en primer lugar a reflexionar sobre la situación religiosa en los países occidentales donde se asiste a un proceso de secularización, con tentativas de marginación de los valores espirituales de la vida social.

En segundo lugar expuso la situación de la libertad religiosa en los países islámicos, recordando las conclusiones a las que ha llegado la reciente Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para Oriente Medio que se celebró entre el 10 y el 24 de octubre. El Cardenal expuso la actividad de la Santa Sede y de los episcopados locales en defensa de los católicos, tanto en Occidente como en Oriente. Así recordó el compromiso de la Santa Sede en ámbito internacional para promover frente a los Estados y a las Organizaciones de las Naciones Unidas el respeto de la libertad religiosa de los creyentes.

Por su parte el Cardenal Cañizares resaltó la importancia de la oración litúrgica en la vida de la Iglesia, remitiéndose a la doctrina del Concilio Vaticano II y al magisterio del Papa Benedicto XVI. De manera particular subrayó la importancia de la fidelidad a la vigente disciplina litúrgica.

En el curso del amplio debate han intervenido 18 cardenales. También se han abordado las graves dificultades que la Iglesia encuentra en la defensa de los valores fundados en el mismo derecho natural, como el respeto de la vida y de la familia.

Por la tarde hay previstas dos comunicaciones. La primera será del Cardenal William Joseph Levada, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF), sobre las Normas de la Santa Sede: para acoger en la Iglesia Católica a los sacerdotes y fieles anglicanos, y para defender a los menores víctimas de abuso por parte de algunos miembros del clero.

La segunda intervención está a cargo del Arzobispo Angelo Amato, Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos y Secretario de la CDF, que hablará de la actualidad de la Instrucción "Dominus Iesus", sobre Jesucristo, a diez años después de su publicación.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Pareja demanda a clínica por "producto fallado": Niña con Síndrome de Down

LIMA, 12 Nov. 10 / 01:36 pm (ACI)

"¿Cómo se sentiría si le dieran un producto fallado?", con estas palabras un padre de familia justificó ante la prensa su decisión de demandar a una clínica de fertilidad que –asegura– lo estafó con un tratamiento de fecundación in vitro por el que una de sus mellizas nació con Síndrome de Down.

En declaraciones a Radio Programas del Perú, Walter Gonzáles y Ana María Rodríguez, denunciaron a la clínica Concebir de esta capital por el nacimiento de su hija Mariana, que ya tiene nueve meses de edad, quien a diferencia de su hermana sana, presenta Síndrome de Down y complicaciones congénitas.

La pareja afirmó que pagó 15 mil dólares por el tratamiento completo de fecundación in vitro. La madre declaró que la clínica los había estafado pues les prometieron "los mejores embriones: los más vivos, los más capacitados" y no cumplieron.

"Fui con muchas ilusiones, con todas la ganas de tener un bebé, invertí tiempo, dinero y viajes, para ahora ver a mi hija sufrir. Ellos me prometieron tener un bebé sano, robusto, y ahora la veo decayendo postrada en una cama sin poder hacer su vida normal", agregó la madre.

Ahora exigen el pago de un millón de soles (unos 350 mil dólares) como reparación por mala praxis y para dar una mejor calidad de vida a la bebé, cuyo nacimiento –alega la madre– pudo evitarse si la clínica "hacía un análisis genético antes de implantar los embriones".

El padre acusa al médico tratante, identificado como Ivo Vlásica, de no ofrecerles el análisis. "En ese examen se hubiera determinado los problemas de mi hija y no hubiéramos permitido la implantación, para que cuando nazca no sufra como está sufriendo ahora", señaló.

"Esto le podía pasar a cualquier persona. Podíamos detectarlo antes de los tres meses, pero quedaba a nuestra responsabilidad si decidíamos tenerlas o cortar con el embarazo", dijo el padre.

Vlásica declaró a RPP que sí informó a la pareja del examen, pero que esta prefirió no realizarlo. También explicó que los padres firmaron un documento en el que se especifica que "hay un 4 por ciento de riesgo en la población mundial de que el niño nazca con algún mal y no hay ciencia que pueda evitarlo".

En declaraciones a ACI Prensa, la presidenta de la organización pro-vida y familia CEPROFARENA, Gloria Adaniya, lamentó que casos como éste manifiesten una visión mercantilista de la procreación y recordó que el hijo "no debe ser considerado un objeto de propiedad".

"Nadie puede diseñar un tipo de bebé porque no se está hablando de objetos sino de vidas humanas. El ser humano, es un regalo de Dios y es un regalo del matrimonio, y no estamos en condiciones de estar eligiendo cómo debe ser", indicó.

La doctrina católica se opone a la fecundación in vitro por dos razones primordiales: primero, porque se trata de un procedimiento contrario al orden natural de la sexualidad que atenta contra la dignidad de los esposos y del matrimonio; segundo, porque la técnica supone la eliminación de seres humanos en estado embrionario tanto fuera como dentro del vientre materno, implicando varios abortos en cada proceso.

sábado, 6 de noviembre de 2010

Gaudí y la Sagrada Familia: una gran catequesis en piedra



Los que conocen la vida de Gaudí nos dicen que uno de sus libros de cabecera era el titulado El Año Litúrgico, del abad Dom Prosper Guéranger, libro que tuvo gran divulgación entre los estudiosos y los fieles a inicios del siglo XX en Cataluña.

Gaudí era un admirador de la liturgia cristiana y de su estética. Esto explica que proyectara el templo de la Sagrada Familia como una gran catequesis de la Iglesia, tal como ésta se expresa a lo largo del año litúrgico.

Si contemplamos el templo por fuera, con sus dieciocho campanarios y sus fachadas y muros, nos hallamos ante la realidad de la Iglesia: la torre más alta o campanario dedicado a Jesucristo; la rodean los cuatro evangelistas; en el ábside, como seno materno, la Virgen María; y los doce apóstoles, distribuidos en grupos de cuatro en cada una de las tres fachadas principales: Nacimiento, Pasión y Gloria.

Se ha dicho que una de las innovaciones geniales de Gaudí consistió en sacar el contenido de los retablos interiores, pasándolo al exterior, a las fachadas. Por eso cada una de ellas es como un gran retablo que ofrece al visitante o al fiel la contemplación de los misterios de la infancia, pasión y resurrección del Señor, su mensaje de vida en las bienaventuranzas y los sacramentos, la profesión de fe y la creación y la glorificación de la humanidad (fachada de la Gloria). La contemplación continúa en los muros y los ventanales, donde vemos las figuras de los santos y santas, decorados como frutos del Espíritu Santo. Y en los ventanales mayores se pueden contemplar los símbolos eucarísticos.

Si observamos el templo por dentro, que es el espacio de la celebración, también hallamos el misterio de la Iglesia. La construcción de la nave está inspirada en la visión del profeta Ezequiel -en el capítulo 47- y en la visión de la Jerusalén celestial, que se encuentra en el capítulo 22 del libro del Apocalipsis.

Cuando el visitante entre en la nave se hallará como ante un bosque de palmeras. Pero cada uno de estos árboles -las columnas- está dedicado a una Iglesia particular. Están así representadas todas las diócesis, tanto las de aquí como las del mundo entero. Gaudí pensó un templo de verdad católico y universal, por ello simbolizó en él los cinco continentes del mundo y tiene tanto sentido que sea el Papa quien presida su dedicación.

Por lo que se refiere a las columnas, podemos añadir que son un conjunto de cincuenta y dos. Son todos los domingos del año. Las que rodean el presbiterio están dedicadas al Adviento y a la Cuaresma; las cuatro del crucero, a la Navidad, Ramos, Pascua de Resurrección y Pentecostés; las del transepto, al tiempo pascual; y el espacio de las cinco naves a los domingos de todo el año.

Todo lo cual, aunque sea dicho en forma de sumario, justifica que podamos afirmar que la Sagrada Familia es un templo único en el mundo a causa de su simbología bíblica y litúrgica, y también por las innovaciones propiamente técnicas utilizadas en su construcción. Su simbología religiosa explica que un nuncio del Papa en España, monseñor Rangonesi, al visitar en el año 1915 el templo y escuchar las explicaciones de boca de Gaudí en persona, cuando acabaron la visita, le dijera entusiasmado: "¡Usted es el Dante de la arquitectura!"

sábado, 30 de octubre de 2010

La muerte, ¿tragicomedia o realidad esperanzada?


Por monseñor Francisco Gil Hellín, arzobispo de Burgos



BURGOS, sábado, 30 de octubre de 2010 (ZENIT.org).-

Publicamos el artículo que ha escrito monseñor Francisco Gil Hellín, arzobispo de Burgos, ante la inminencia de la celebración de los fieles difuntos.

* * *

Nosotros celebramos el cumpleaños el día de nuestro nacimiento. Y, cuando se pregunta a los deudos por la fecha de nacimiento del familiar difunto, remiten también a ese día. La Iglesia, en cambio, procede de otro modo. Para ella, "el día del nacimiento" de sus hijos -el dies natalis- es el día de la muerte. Eso explica que cuando declara que alguno de ellos es santo, fija su celebración el día de su muerte, no el de su nacimiento.

Este modo de proceder no es una rareza ni un afán de singularizarse, sino que responde a la idea que ella tiene de la muerte. La Iglesia es consciente de que el hombre, como todos los seres vivos de la tierra, cambia con el paso de los años, envejece y, al final, siente en su carne la muerte corporal. Pero ella, a diferencia de quienes tienen una concepción materialista del mundo y del hombre, profesa que la muerte no es el final del hombre sino el final de su etapa terrena y de su peregrinación por este mundo. Es el final del caminar terreno pero no el final de nosotros mismos, de nuestro ser: nuestra alma es inmortal y nuestro cuerpo está llamado a la resurrección al final de los tiempos.

La concepción que la Iglesia tiene de la muerte es, pues, profundamente esperanzada. Me atrevería a decir que es incluso gozosa. Ella no ve en la muerte una tragedia que nos destruye y sepulta en el reino de la nada, sino la puerta que nos abre a una nueva vida; vida que no tendrá fin. Por eso, el máximo enigma de la vida humana, que es la muerte, queda iluminado con la certeza de una eternidad con Dios. Apoyada en esta certeza creó muchos usos y prácticas funerarias. Por ejemplo, sustituyó el término "necrópolis" -"ciudad de los muertos"- que encontró en el ámbito del imperio grecorromano, por el de "cementerio" o "dormitorio". En esa perspectiva llegó a sustituir el mismo término "muerte" por el de "sueño". Las personas no se morían sino que se dormían.

Por esa misma razón trató con gran respeto a los cadáveres. Algunas de esas muestras perduran hasta el día de hoy, como la de rociarlos con agua bendita y perfumarlos con incienso. La misma costumbre de inhumar y no quemar los cadáveres arranca de esta misma concepción antropológica. De hecho, aunque hoy permite la cremación de los cadáveres, sin embargo exige que esa elección no se haga por razones contrarias a la fe cristiana, a la cabeza de las cuales se encuentra la resurrección de los muertos.

Esta idea de la vida y de la muerte del hombre es una fuente inagotable de consuelo. Una esposa o una madre, por ejemplo, dicen a su cónyuge o a su hijo mas que "adiós", "hasta luego" o "hasta pronto", sabedores de que un día volverán a encontrarse. El ramo de flores que depositamos en la tumba de nuestros antepasados, expresa nuestro convencimiento de que ellos perviven y de que nosotros nos sentimos unidos a ellos con vínculos realísimos. Lo mismo ocurre con el diálogo que tantas veces mantenemos con ellos: no es un sentimentalismo vano, sino que responde a una realidad muy profunda.

La comunión de vida, afectos y creencias que hemos mantenido en la vida, no se destruyen sino que se subliman; por eso, rezamos por nuestros difuntos y por eso rezamos a nuestros difuntos. Esta comunión es particularmente intensa en la celebración de la Eucaristía, pues en ella nos unimos con vínculos especiales todos los que somos miembros de Cristo, con independencia de que peregrinemos todavía en este mundo o hayan llegado ya al final y se purifiquen o gocen de la visión de Dios.

La muerte no es nunca una comedia. Menos todavía, una tragicomedia. Para quienes creemos en Jesucristo una puerta de fe y esperanza que nos introduce en el encuentro definitivo con él y con todos los que hemos estado unidos aquí abajo. Sólo por esto vale la pena ser cristiano.

domingo, 24 de octubre de 2010

Liderazgo


Por lo general se reconoce la figura de un líder por ser quien va a la cabeza, sobre sus hombros tiene la responsabilidad de llevar adelante todo género de proyectos, distinguiéndose por ser una persona emprendedora y con iniciativa, con la habilidad de saber transmitir sus pensamientos a los demás, comprensión de las personas y la desarrollada capacidad de conjuntar equipos de trabajo eficientes.

Ante esta perspectiva, puede parecer que este nivel de personalidad sólo está reservado para unos cuantos, lamentablemente, pocas personas saben que un liderazgo efectivo no esta expresado por un nombramiento o designación específica.

En todos los equipos de trabajo -desde los escolares hasta los de alta dirección de empresas- encontramos al menos a una persona, que sin tener el peso de una responsabilidad, sobresale por su iniciativa, amplia visión de las circunstancias, gran capacidad de trabajo y firmes decisiones; sus ideas y aportaciones siempre son consideradas por la certeza y oportunidad con que las expresa; por otra parte, se distingue por su facilidad de diálogo y la habilidad que tiene para relacionarse con todos dentro y fuera del trabajo.

Este tipo de personas sobresalen, además, por poseer un cúmulo de buenos hábitos y valores: Alegría, amabilidad, orden, perseverancia (entre muchos otros), despertando en nosotros admiración y respeto. En otras palabras: son un digno modelo y ejemplo.

martes, 19 de octubre de 2010

Iglesias orientales: La Iglesia de tradición bizantina (II)


Ecumenismo y cisma, persecución y martirio


ROMA, viernes 15 de octubre de 2010 (ZENIT.org).- [Continúa]


El rito o tradición bizantina es la mayoritaria en el oriente cristiano, y a él pertenecen unos 300 millones de personas, en su inmensa mayoría de obediencia ortodoxa. Los greco-católicos son 8,5 millones de fieles.

Iglesia greco-melquita

La Iglesia greco-católica melquita tiene su origen en Antioquía durante el Concilio de Calcedonia (451), proveniente de la palabra melek, con la que se identificaba a los que aceptaron Calcedonia (ver el artículo sobre la Iglesia antioquena, Zenit 12 de octubre). Los melquitas, originariamente de rito antioqueno, pasaron a la tradición bizantina.

Tras la conquista de Siria por los musulmanes, estos cristianos fueron gradualmente aceptando influencias culturales árabes, entre ellas, el idioma. Esta Iglesia siguió al Patriarcado de Constantinopla en el cisma de 1054.

Sin embargo, gracias a la predicación de misioneros dominicos (siglo XIV) y sobre todo jesuitas (siglo XVI), se fue creando paulatinamente entre los melquitas una simpatía hacia Roma, que fraguó con la elección de Cirilo VI, que fue excomulgado por el Patriarca de Constantinopla y confirmado por el papa Benedicto XIII, en 1724.

El cabeza de la Iglesia melquita, Gregorio III Laham, lleva el título de Patriarca católico greco-melquita de Antioquía y Todo el Oriente, Alejandría y Jerusalén. Cuenta con casi 1,2 millones de fieles, y tiene su sede en Damasco, se extiende por todo Oriente Medio y tiene una comunidad significativa en Estados Unidos.

Según el experto Pier Giorgio Gianazza, esta Iglesia es la más “árabe” de todas las Iglesias católicas orientales, y está empeñada en un importante diálogo ecuménico con el Patriarcado ortodoxo de Antioquía. Cuenta con varias instituciones asistenciales y educativas. Es muy activa también en el diálogo con los musulmanes.

Iglesia católica griega

Unos ochocientos años después del cisma de 1054, en 1856, empezó a formarse una pequeña comunidad de griegos católicos, fundamentalmente en Constantinopla, a raíz de la predicación de un sacerdote griego de rito latino.

El papa Pío X erigió en 1911 un ordinariato para estos católicos bizantinos, que llegaron a tener incluso su propio seminario. Sin embargo, con la derrota del Imperio otomano tras la primera Guerra Mundial, muchos de ellos emigraron a Atenas, y los que no, sufrieron persecución.

Esta comunidad católica de rito bizantino es hoy muy pequeña, unos 2.500 miembros, y se divide en dos exarcados, el de Atenas, cuyo jerarca es Dimitrios Salachas, y el de Constantinopla, que prácticamente ha desaparecido en número de fieles.

Iglesia rumana bizantina

La Iglesia católica rumana fue también producto de la emigración, especialmente de católicos alemanes y rutenos, a Transilvania, que entonces era territorio húngaro y mayoritariamente ortodoxo.

Tras el cisma de Lutero, se extendió el protestantismo calvinista en Rumanía, lo que llevó en 1697 al obispo ortodoxo de Transilvania en Alba Julia, Teofil Seremi, a plantearse la unión con Roma, en 1700. Sin embargo, una buena parte de los rumanos permanecieron ortodoxos.

Aunque al principio los católicos bizantinos dependían de la Iglesia húngara de rito latino, el papa Pío X creó una eparquía propia, Hajdúdorog en 1912. Durante el régimen comunista, esta Iglesia fue suprimida y sus fieles, obligados a unirse a los ortodoxos.

La clandestinidad duró hasta la revolución contra Ceaucescu de 1989.

Actualmente esta Iglesia cuenta con unos 550.000 fieles. Para diferenciarse de los ortodoxos, los greco-católicos rumanos utilizan el rumano en la liturgia. Su actual cabeza es el archieparca mayor Lucian Mureşan.

Iglesia rutena

Esta Iglesia está vinculada históricamente a Rutenia, cuyo territorio comprendía la actual Ucrania, Bielorrusia y una parte de la Rusia europea.

Como hemos visto al hablar de la Iglesia bizantina eslovaca, una parte de la Iglesia rutena participó en la llamada Unión de Uzhhorod. Hubo después otras dos uniones, en 1664 y 1713, tras lo cual prácticamente casi todos los rutenos pasaron a la obediencia de Roma.

Para los rutenos en concreto, el papa Clemente XIV creó la eparquía de Mukachevo (1778). Tras la primera guerra mundial, y con la disolución del Imperio austrohúngaro, Rutenia fue dividida entre Checoslovaquia, Ucrania y Bielorrusia.

La Iglesia rutena actual se encuentra en territorio de Ucrania. Durante el dominio comunista, también esta Iglesia fue forzada a pasar a la ortodoxa, y en muchos lugares, sus fieles fueron directamente deportados a la Unión Soviética. Otros muchos lograron emigrar a Estados Unidos.

Actualmente cuenta con unos 533.000 miembros, reunidos en torno a la Eparquía de Mukachevo.

Iglesia greco-católica ucraniana

Se trata de la Iglesia más numerosa de todas, con 5,5 millones de fieles. También es la más dispersa, pues sus fieles se encuentran repartidos, por la emigración, en más de 40 países distintos.

Su territorio está más o menos relacionado con la antigua rus de Kiev. Tras el cisma de 1054, la Iglesia vivió momentos difíciles, pasando con los siglos a acercarse paulatinamente a Polonia. El patriarca de Kiev asistió al Concilio de Florencia en 1440 y acordó volver a la obediencia de Roma. Esto fue interpretado por los rusos como signo de enemistad.

Los greco-católicos ucranianos acudieron en varias ocasiones a Roma para pedir protección, frente al expansionismo ruso por un lado y la influencia latinizadora de los polacos por otro. En 1596, como ya hemos visto, toda la jerarquía eclesiástica ucraniana pasó a Roma en el Sínodo de Brest.

Con la dominación rusa, los greco-católicos sufrieron una persecución sistemática, hasta el punto de que sólo sobrevivieron en el este de Ucrania, bajo dominio austrohúngaro (Galitzia). A finales del siglo XIX, prácticamente habían desaparecido.

En Galitzia, después de la segunda guerra mundial, los comunistas persiguieron aún con más saña a los greco católicos, encarcelando a toda su jerarquía, encabezada por el cardenal Slipyj. Tras la caída del Muro, ha habido en Ucrania una “resurrección” de los católicos. El papa Juan Pablo II visitó el país en 2001.

Iglesia italo-albanesa

Esta Iglesia procede de la inmigración, especialmente en Calabria y Tarento durante el siglo XV, a causa de la presión musulmana. Algunos de los inmigrantes eran ya bizantinos católicos, y otros se unieron a Roma después de su llegada a Italia.

En 1595, el papa Clemente VIII reconoció la presencia de estos fieles y dio instrucciones para que fuesen atendidos en sus necesidades, y en 1742, otro papa, Benedicto XIV, les dio un primer código canónico. En 1919 se fundó la eparquía de Lungro, y en 1937 la eparquía de Piana degli Albanesi.

Actualmente agrupa a unos 67.000 fieles. Allí está también el único monasterio italiano de rito bizantino, Santa Maria di Grottaferrata, que tiene más de mil años de antigüedad.

Iglesia rusa

La Iglesia greco-católica rusa surgió en 1905 de un cisma de la Iglesia ortodoxa rusa, alrededor del poeta Vladimir Sergeyevich Soloviev, quien afirmaba que se podía ser fiel ortodoxo y estar unido a Roma. Un seguidor suyo, el sacerdote Nicolás Tolstoi, se hizo católico y organizó una pequeña comunidad en Moscú.

A pesar de las persecuciones, primero por el régimen zarista y luego la brutal represión comunista, siguió existiendo un exarcado apostólico en la clandestinidad, y se creó otro para los católicos refugiados en China, con sede en Shangai.

Actualmente existe un “renacimiento” de esta comunidad, aunque aún no tiene formalmente un jerarca propio. Cuenta con unos 3.800 fieles y su liturgia no tiene diferencias con la ortodoxa rusa.

Por Inma Álvarez


sábado, 16 de octubre de 2010

Iglesias orientales: La Iglesia de tradición bizantina (I)


Ecumenismo y cisma, persecución y martirio


ROMA, viernes 15 de octubre de 2010 (ZENIT.org).-


El rito o tradición bizantina es la mayoritaria en el oriente cristiano, y a él pertenecen unos 300 millones de personas, en su inmensa mayoría de obediencia ortodoxa.

Históricamente están vinculadas al antiguo Imperio bizantino, y por tanto al Patriarcado de Constantinopla, aunque a lo largo de los siglos, se han ido constituyendo iglesias autocéfalas en los distintos países, destacando en número de fieles el Patriarcado de Moscú.

Sería muy largo y ajeno al propósito de esta serie de artículos profundizar en las causas que llevaron al Gran Cisma de 1054, y que actualmente están siendo objeto de discusión en el Comité de Diálogo Ecuménico entre Católicos y Ortodoxos.

Lo que subrayan todos los expertos es que el acto formal del cisma, la excomunión entre el papa y Miguel Cerulario, fue la culminación de un largo camino de distanciamiento entre Oriente y Occidente, no sólo en cuestiones canónicas y disciplinares, sino también litúrgicas, culturales e históricas.

En cualquier caso, ya desde el primer momento hubo intentos de reconstruir la unidad perdida, sin éxito. Después, Occidente viviría otro doloroso Cisma, el de Lutero, que volcaría su atención lejos de la cuestión oriental durante siglos.

De las tensiones entre ambas Iglesias y de las vicisitudes de los siglos, fueron surgiendo trece Iglesias católicas de rito bizantino, especialmente en Europa Oriental, también conocidas como “uniatas”, que explicaremos a continuación.

La liturgia bizantina o griega, la mayoritaria y más seguida de todos los ritos orientales, es llamada también Divina Liturgia, de una gran belleza visual, pues de ella participan también los iconos, la música, los ornamentos sagrados y la propia arquitectura, de forma que el fiel está “dentro” de la liturgia.

Procede de la liturgia que se celebraba en Antioquía, llamada “de Santiago”, y que fue reformada por san Basilio y san Juan Crisóstomo (siglos IV y V). Una de las importantes diferencias con el rito latino es el calendario festivo, el juliano, que va 14 días por detrás del gregoriano occidental.

La Sagrada Escritura está constantemente presente en la liturgia, mucho más que en Occidente. Se practica el ayuno más estrictamente, especialmente durante la Gran Cuaresma. Tienen una grandísima veneración a la Virgen María, bajo el título de Theotokos.

En cuestión de disciplina eclesiástica, los sacerdotes pueden ser hombres casados (aunque no pueden contraer matrimonio después de su ordenación, sólo antes). La lengua litúrgica utilizada es el griego o el eslavo antiguo, dependiendo de la influencia rusa o griega.

Otra característica importante de la Iglesia bizantina es la importancia del monaquismo, de las horas litúrgicas, y de la devoción particular, a través de la llamada “oración del corazón”.

Iglesia católica albanesa

La Iglesia bizantina de Albania pertenecía al patriarcado de Roma, a diferencia de las demás, que dependían de Constantinopla. En el año 731, en medio de las luchas iconoclastas, el emperador bizantino León III conquistó Albania y anexionó su Iglesia a Constantinopla, con lo que también participó en la ruptura de 1054.

Después, Albania cayó bajo el dominio musulmán, con lo que la Iglesia pasó a ser minoritaria. Entre 1895 y 1900, varios grupos de ortodoxos se hicieron católicos y solicitaron un obispo de su propio rito, lo que les fue concedido por Pío XII en 1939, en forma de Administración Apostólica.

Con la persecución comunista, y especialmente desde 1967, con la proclamación de Albania como Estado oficialmente ateo, la Iglesia católica albanesa pasó a la total clandestinidad hasta la caída del régimen. Hoy son 1.500 fieles, agrupados en una sola parroquia y dependen directamente de la Congregación para las Iglesias Orientales.

Iglesia greco-católica bielorrusa

Esta Iglesia católica data de la unión de Brest (1596), cuando los obispos ortodoxos de la provincia de Kiev decidieron en grupo volver a la comunión con Roma. De esta unión surgieron las Iglesias greco católicas de Bielorrusia y Ucrania.

Tras la invasión de Bielorrusia en el siglo XVIII por los rusos, muchos católicos se unieron, unos voluntariamente y otros de forma forzosa, a la Iglesia ortodoxa rusa. Aunque en 1905 se reconoció libertad de culto, muchos católicos optaron por pasar al rito latino, y la Iglesia bizantina católica quedó reducida a unos 30.000 fieles.

Bajo la dominación comunista, los greco-católicos fueron de nuevo unidos por la fuerza a la Iglesia ortodoxa, hasta 1991. Los que lograron salir del país establecieron comunidades en la diáspora, que aún hoy existen.

Esta Iglesia actualmente cuenta con unos 5.500 fieles, agrupados en unas veinte parroquias. Depende directamente de la Congregación para las Iglesias Orientales.

Iglesia greco-católica bulgara

La Iglesia ortodoxa búlgara ha estado tradicionalmente unida al Patriarcado de Constantinopla, a pesar de su independencia inicial. A lo largo de su historia, la reacción contra la helenización se confundió con los sentimientos nacionales, lo que afectó también a las relaciones con Roma.

A mitad del siglo XIX, el archimandrita Sokolsky pidió la unión con Roma, y fue consagrado como primer obispo católico bizantino, aunque el movimiento pro-Roma se disolvió tras conseguir de Constantinopla el reconocimiento de la independencia eclesiástica.

La pequeña comunidad greco-católica búlgara está formada hoy por unos 22.000 fieles, agrupados en el Exarcado de Sofía. La mayor parte de los católicos búlgaros siguen el rito latino.

Iglesia de los greco-católicos de ex Yugoslavia

También llamada Iglesia católica bizantina de la eparquía de Križevci, agrupa a los fieles católicos bizantinos de Bosnia, Croacia y Eslovelia (eparquía de Križevci), y el exarcado apostólico de Serbia y Montenegro.

Esta Iglesia se constituyó a lo largo de los siglos XVIII y XIX mayoritariamente con población emigrada desde Galitzia tras su conquista por parte de Rusia, así como de católicos rutenos procedentes de Transcarpatia y Eslovaquia. Actualmente son unos 53.000 fieles.

Iglesia greco-católica húngara

También tiene su origen en la emigración de católicos rutenos de rito bizantino. Lo más característico de esta Iglesia es que, debido a que un importante grupo protestante, en el siglo XVIII, se unió a ella adoptando el rito bizantino, se introdujo el uso del húngaro en la liturgia, en lugar del griego, aunque sin autorización.

En el año 1900, un grupo de greco-católicos húngaros peregrinaron a Roma para el Año Santo, y aprovecharon para pedir al papa León XIII que autorizara su situación y les proporcionara un obispo propio. En 1912, el papa Pío X erigió para ellos la Eparquía de Hajdúdorog. Actualmente son 302.000 fieles.

Iglesia bizantina eslovaca

En 1646, un importante grupo de jerarcas ortodoxos rutenos tomó la decisión de unirse de nuevo a Roma, en la llamada Unión de Uzhhorod, similar a la que habían protagonizado los ucranianos en Brest casi un siglo antes.

La Iglesia greco-católica eslovaca estuvo unida a la Iglesia rutena durante varios siglos. Durante la segunda Guerra Mundial, y tras la invasión comunista, el nuevo gobierno obligó a los greco-católicos a abandonar a Roma y unirse al Patriarcado de Moscú. El obispo greco-católico de Prešov, monseñor Gojdič, fue encarcelado y ejecutado.

Tras la caída del comunismo y la división del país, el papa Juan Pablo II creó el exarcado de Košice. El 30 de enero de 2008 el Papa Benedicto XVI elevó a la Iglesia a la categoría de metropolitana sui iuris, al mismo tiempo que elevaba Košice al rango de eparquía. Hoy cuenta con 258.000 fieles.

[Continúa...]

Por Inma Álvarez

sábado, 9 de octubre de 2010

Gaudí, una gran catequesis en piedra


Cardenal Lluís Martínez Sistach


BARCELONA, sábado 9 de octubre de 2010 (ZENIT.org).- Publicamos el mensaje que ha escrito el cardenal Lluís Martínez Sistach, arzobispo de Barcelona, en preparación de la consagración del templo de la Sagrada Familia en Barcelona, el 7 de noviembre, por Benedicto XVI.



* * *

Los que conocen la vida de Gaudí nos dicen que uno de sus libros de cabecera era el titulado El Año Litúrgico, del abad Dom Prosper Guéranger, libro que tuvo gran divulgación entre los estudiosos y los fieles a inicios del siglo XX en Cataluña.

Gaudí era un admirador de la liturgia cristiana y de su estética. Esto explica que proyectara el templo de la Sagrada Familia como una gran catequesis de la Iglesia, tal como ésta se expresa a lo largo del año litúrgico.

Si contemplamos el templo por fuera, con sus dieciocho campanarios y sus fachadas y muros, nos hallamos ante la realidad de la Iglesia: la torre más alta o campanario dedicado a Jesucristo; la rodean los cuatro evangelistas; en el ábside, como seno materno, la Virgen María; y los doce apóstoles, distribuidos en grupos de cuatro en cada una de las tres fachadas principales: Nacimiento, Pasión y Gloria.

Se ha dicho que una de las innovaciones geniales de Gaudí consistió en sacar el contenido de los retablos interiores, pasándolo al exterior, a las fachadas. Por eso cada una de ellas es como un gran retablo que ofrece al visitante o al fiel la contemplación de los misterios de la infancia, pasión y resurrección del Señor, su mensaje de vida en las bienaventuranzas y los sacramentos, la profesión de fe y la creación y la glorificación de la humanidad (fachada de la Gloria). La contemplación continúa en los muros y los ventanales, donde vemos las figuras de los santos y santas, decorados como frutos del Espíritu Santo. Y en los ventanales mayores se pueden contemplar los símbolos eucarísticos.

Si observamos el templo por dentro, que es el espacio de la celebración, también hallamos el misterio de la Iglesia. La construcción de la nave está inspirada en la visión del profeta Ezequiel -en el capítulo 47- y en la visión de la Jerusalén celestial, que se encuentra en el capítulo 22 del libro del Apocalipsis.

Cuando el visitante entre en la nave se hallará como ante un bosque de palmeras. Pero cada uno de estos árboles -las columnas- está dedicado a una Iglesia particular. Están así representadas todas las diócesis, tanto las de aquí como las del mundo entero. Gaudí pensó un templo de verdad católico y universal, por ello simbolizó en él los cinco continentes del mundo y tiene tanto sentido que sea el Papa quien presida su dedicación.

Por lo que se refiere a las columnas, podemos añadir que son un conjunto de cincuenta y dos. Son todos los domingos del año. Las que rodean el presbiterio están dedicadas al Adviento y a la Cuaresma; las cuatro del crucero, a la Navidad, Ramos, Pascua de Resurrección y Pentecostés; las del transepto, al tiempo pascual; y el espacio de las cinco naves a los domingos de todo el año.

Todo lo cual, aunque sea dicho en forma de sumario, justifica que podamos afirmar que la Sagrada Familia es un templo único en el mundo a causa de su simbología bíblica y litúrgica, y también por las innovaciones propiamente técnicas utilizadas en su construcción. Su simbología religiosa explica que un nuncio del Papa en España, monseñor Rangonesi, al visitar en el año 1915 el templo y escuchar las explicaciones de boca de Gaudí en persona, cuando acabaron la visita, le dijera entusiasmado: "¡Usted es el Dante de la arquitectura!"

sábado, 2 de octubre de 2010

Comenzó el Mes del Rosario





Buenos Aires, 1 Oct. 10 (AICA)

Comienza hoy en todo el mundo el Mes del Rosario, dedicado a la devoción recomendada por los Sumos Pontífices, y durante los 31 días de octubre, en todas las iglesias y oratorios se rezará el Rosario en honor de la Santísima Virgen. También se recomienda rezarlo en el seno de las familias.

El origen de esta oración contemplativa como la conocemos hoy se remonta a finales del siglo XII, y fue promovida por Santo Domingo de Guzmán a partir de una visión que tuvo de la Virgen, que le pidió que lo rece como un arma eficaz para lograr la conversión de las almas

Por su parte, la fiesta de Nuestra Señora del Rosario se instituyó a partir del triunfo en la batalla de Lepanto el 7 de octubre de 1571. En esa ocasión el papa San Pío V había pedido a los cristianos que rezaran el rosario por la flota. El Pontífice instituyó la fiesta de Nuestra Señora de las Victorias el 7 de octubre y al año siguiente, Gregorio XIII cambió el nombre de la fiesta por el de Nuestra Señora del Rosario y determinó que se celebre el primer domingo de octubre por ser el día en que se había ganado la batalla. En la actualidad, la fiesta se celebra nuevamente el 7 de octubre y todo el mes está dedicado al Rosario.

En este marco, se realizan varias campañas de oración con el Rosario, entre ellas, la campaña de Oración por las Misiones, “Octubre Misionero”, y la de los niños que rezan por la paz en todo el mundo conocida como “Un millón de niños rezando el rosario”.+

domingo, 26 de septiembre de 2010

Expedición misionera salesiana evangelizará los cinco continentes





ROMA, 25 Sep. 10 / 01:18 pm (ACI)

Más de 80 miembros de la Congregación de los Salesianos inician este domingo 26 de setiembre la 141° Expedición Misionera que evangelizará los cinco continentes, en especial Europa.

En una solmene Misa en la Basílica de María Auxiliadora en Turín (Italia) el Rector Mayor de los Salesianos, P. Pascual Chávez Villanueva, entregará el mandato misionero a los miembros de la 141° Expedición.

El grupo de misioneros está compuesto por 42 salesianos, 8 salesianas y 22 seglares. Según informa la oficina de prensa de los salesianos, 11 de los misioneros serán destinados a Europa, "considerado tierra de misión".

Los Misioneros de Don Bosco, que recibirán el crucifijo misionero de manos del Rector Mayor, incluyen a 24 que vienen de Asia, 10 de los cuales provienen de Vietnam y el resto llega de Europa, América y África.

Junto a los salesianos serán enviadas a evangelizar 8 misioneras de las Hijas de María Auxiliadora y 22 voluntarios laicos. La Misa de envío será televisada en directo en www.missionidonbosco.tv con conexión a partir de las 12:20 (GMT+1).

domingo, 19 de septiembre de 2010

Voluntarios con Don Bosco Salesianos Consagrados

Voluntarios con Don Bosco Salesianos Consagrados
Voluntarios con Don Bosco Salesianos Consagrados
El 12 de septiembre de 2010 celebran 16 años de fundación




En la Iglesia somos un Instituto Secular masculino compuesto por fieles laicos, llamados por el Espíritu Santo a seguir a Cristo en la Secularidad Consagrada Salesiana.

Somos un grupo de la Familia Salesiana testimoniando el amor de Dios por el mundo con corazón salesiano.

Asumimos la profesión de los Consejos Evangélicos de castidad, pobreza y obediencia para tender a la perfección de la caridad al estilo de Don Bosco sin habitar en una casa religiosa y formarse en un seminario, sino desde nuestra propia situación de laicos en el mundo.

Vivimos nuestra consagración en trabajo, en la competencia profesional y en las circunstancias ordinarias de la vida permaneciendo la familia o solos, no vivimos en comunidad, pero estamos unidos por un vinculo de amistad y profundad comunión fraterna con los hermanos del Instituto, nos encontramos para momentos de, revisión, retiros, ejercicios espirituales, fraternidades y otros momentos de formación.

Somos laicos que Dios consagra en la Iglesia para el mundo, no olvidamos el mundo por Dios, ni el Dios por el mundo.

Descubrimos a Cristo en el rostro de cada hombre.
Participamos en la vida social, cultural y política, aportando la riqueza y plenitud de los valores cristianos.

Nos comprometemos a vivir los consejos evangélicos para vivir como Cristo, un amor casto, pobre y obediente, testimoniando así una libertad donada de total entrega al Reino según la espiritualidad salesiana, no nos identifica ningún signo externo.

Somos testigos de un Dios que recorre los caminos de los hombres

Mantenemos la “reserva” sobre nuestra pertenencia al Instituto, para poder obrar con mayor eficacia

¿Qué significa CDB?

CDB: La denominación de nuestro Instituto es ‘Voluntarios Con Don Bosco’ y la sigla oficial es CDB, esto recuerda el ( ‘fraile o no fraile’ ) CON DON BOSCO me quedo, pronunciado por Cagliero quien después se haría obispo y gran misionero salesiano, en el momento en el que expresa su firme voluntad de abrazar la propuesta vocacional de Don Bosco.

¿Dónde estamos?

Actualmente estamos presentes en mas de 20 países siempre CON DON BOSCO en: Estados Unidos de América, México, Guatemala, el Salvador, Honduras, Costa Rica, Panamá, Venezuela, Perú, Paraguay, Brasil, Colombia, Argentina, España, Republica Checa, Rep.Eslovaquia, Malta, Italia, Corea y Nigeria por decir algunos.

En México este movimiento empezó en el DF en el año 2000, y fue en abril del 2003 donde se formaliza a los CDB y actualmente están presentes en los Estados: de Nuevo León, Michoacán, D.F, Estado de México

¿Cuando fuimos fundados?

Los CDB nacimos el 12 de septiembre de 1994, en fiesta del Santo Nombre de María, en la Casa General de los Salesianos de Don Bosco, en Roma Italia. Don Egidio Vigano, Séptimo Sucesor de Don Bosco y Rector Mayor de feliz memoria, fue quien recibió las primeras 7 profesiones de los primeros CDB ES POR ESO QUE ESTE 12 DE SEPTIEBRE CELEBRAMOS 16 AÑOS DE FUNDACIÓN.

Nacimos en un día mariano, es por eso que la Virgen siempre está presente en nuestra historia y nuestra vida, Ella es nuestra Madre y Maestra la invocamos como AUXILIADORA.

¿En qué campos profesionales/laborales y apostólicos se desempeñan los CDB?

El campo profesional y laboral de los CDB es tan amplio y basto que no tiene fronteras… A los CDB se les ve en todos los campos de acción profesional, laboral y pastoral, tales como: Educación en todos los niveles, en el sector salud, industrial, agrícola, comercial, en la jurisprudencia, política, la psicología, y en la atención de la pastoral y catequesis de parroquias, colegios, hospitales, casas-hogar, etc. Se les ve también en las misiones, en la promoción vocacional, en la animación de oratorios y grupos juveniles, medios de comunicación social por mencionar algunos, En cualquier profesión y trabajo hacemos posible el carisma de Don Bosco que tiene su origen en Corazón de Cristo Buen Pastor.

¿Cuál es el mensaje y carisma que transmiten con su presencia en el mundo?

Es el mismo de Don Bosco Inspirándonos en el espítu y su caridad pastoral.
Viviendo como Él y San Francisco de Sales, su humanismo optimista.
Viviendo con radicalidad el espíritu de las Bienaventuranzas.
Practicando el sistema preventivo de Don Bosco y teniendo a María Auxiliadora como Madre y Maestra.

¿Cuál es la identidad del CDB?

Son tres principalmente :
– Secularidad
– Consagración
– Salesianidad

¿A dónde pueden comunicarse los interesados en vivir esta experiencia?

Con el P. Francisco Castellanos SDB fcastellanos.sdb@gmail.com al correo de los Voluntarios Con Don Bosco cdbmex2@gmail.com o la casa salesiana más cerca a tu localidad.

domingo, 12 de septiembre de 2010

John Henry Newman, intelectual, sacerdote y santo


Monseñor Francisco Gil Hellín


BURGOS, sábado, 11 de septiembre de 2010 (ZENIT.org).- Publicamos el mensaje que ha escrito monseñor Francisco Gil Hellín, arzobispo de Burgos, en preparación de la beatificación de John Henry Newman durante el viaje que Benedicto XVI realizará del 16 al 19 de setiembre a Gran Bretaña.



* * *

El próximo 19 de septiembre, el Papa Benedicto XVI beatificará a John Henry Newman, más conocido como "el Cardenal Newman", en el aeropuerto de Londres. Se trata de un acto de enorme calado y proyección, porque así hay que calificar tanto el hecho de que sea el Papa de Roma quien acuda a beatificar a un ex miembro de la Iglesia anglicana, precisamente en el corazón de esa misma Iglesia, como el que pueda hacerlo sin que se conmuevan los cimientos de la Iglesia de Inglaterra, en la que la Reina es su Jefe Supremo. No es, pues, de extrañar que el acto haya suscitado un inusitado interés y sea cubierto por una nube de periodistas.

¿Quién era Newman? Newman fue un inglés nacido en Londres, cuyo padre era banquero y su madre pertenecía a una familia de fabricantes de papel. A los siete años fue enviado a una escuela privada, donde se distinguió por su inteligencia y buena conducta. Pronto comenzó a leer la Biblia, por la que se sintió no sólo atraído sino subyugado. Más adelante realizó los estudios universitarios, en los cuales volvió a sobresalir. Pero no se encerró en lo estrictamente académico, pues representó obras de teatro en latín, tocaba el violín, ganó premios de oratoria y editó publicaciones periódicas.

El año 1816 tuvo una influencia decisiva en su vida. El banco de su padre dio en quiebra, como consecuencia de las guerras napoleónicas, y él mismo contrajo una grave enfermedad, que, a la larga, sería una de las tres enfermedades que él calificaría luego como ‘providenciales'. Además, tuvo una conversión religiosa, en cuanto que su fe derivó hacia posiciones evangélicas y calvinistas, llegando a sostener que el Papa era el Anticristo. Años más tarde, en 1824, fue ordenado presbítero de la Iglesia de Inglaterra. Por esa época se convirtió en párroco de St. Clement, en Oxford, donde permaneció dos años, auque sacando tiempo para publicar importantes y densos artículos.

A finales de 1827, Newman sufre una especie de colapso nervioso, provocado por el exceso de trabajo y los problemas financieros de la familia, a lo que se unió la muerte repentina de su hermana menor. Poco después, en las vacaciones de 1928, comenzó a leer sistemáticamente las obras de los Padres de la Iglesia.

Entró en el llamado Movimiento de Oxford, el cual trataba de demostrar que la Iglesia de Inglaterra era la descendiente directa de la Iglesia de los Apóstoles. Esto le llevó más tarde a reconsiderar la relación de la Iglesia de Inglaterra con la Iglesia Católica Romana. Los puntos de vista de Newman fueron asumiendo progresivamente un mayor tono católico. En 1842 se retiró a Littlemore y vivió como monje con un pequeño grupo de seguidores y en condiciones de gran austeridad física. A sus discípulos les asignó la tarea de escribir sobre la vida de los santos ingleses, mientras él escribía «Ensayos sobre el desarrollo de la doctrina cristiana». Poco a poco se fue reconciliando con el dogma y la liturgia de la Iglesia Católica. En 1843 hizo una retractación formal de todas las afirmaciones pronunciadas contra la Iglesia Romana y en septiembre de ese mismo año predicó su último sermón como anglicano. Dos años más tarde se convirtió al catolicismo, siendo ordenado sacerdote católico en junio de 1847.

En 1889 a los 88 años de edad, fue nombrado por León XIII cardenal de la Iglesia Católica. Murió el 11 de agosto del año siguiente. En 1991 fue declarado Venerable y el 3 de junio de 2009 la Santa Sede promulgó el decreto que le atribuye un milagro. El próximo 19 de septiembre será beatificado por Benedicto XVI.

El nuevo beato nos ha dejado en herencia tres grandes amores: a la verdad, a la Sagrada Escritura y a los Padres de la Iglesia. Los tres son de suma actualidad e importancia.

domingo, 5 de septiembre de 2010

Libro de Hawking no logra descartar a Dios, aclaran físicos católicos

ROMA, 04 Sep. 10 / 05:25 am (ACI)

Dos físicos católicos descartaron que el nuevo libro de Stephen Hawking, "The Grand Design", pueda descartar la existencia de Dios como creador del universo, a pesar de que el autor haya lanzado la audaz afirmación de que el universo "se creó de la nada".

El académico jesuita Robert Spitzer explicó que las afirmaciones de Hawking contra la existencia de Dios y en favor de la física reflejan confusiones fundamentales sobre el concepto cristiano de Dios como creador de todo lo que existe, lo que incluye el universo y las leyes de la física que se le aplican.

Según el Padre Spitzer aunque Hawking hable de un universo "creándose a sí mismo de la nada", se presupone que esta "nada" de alguna manera involucra gravedad y otras leyes fundamentales de la física.

Pero los principios como la gravedad no son axiomas irreductibles ni evidentes. Más bien, son las leyes no físicas las que rigen las operaciones ordinarias del mundo físico. No hay comparación entre una creación que se despliega y se desarrolla de acuerdo a las leyes de la materia, y la propuesta de Hawking de "generación espontánea" de la "nada", explica el sacerdote.

Para el experto, Hawking malinterpreta la verdadera relación entre Dios y su creación. "Hawking no ha explicado claramente por qué existe algo en lugar de nada. Sólo ha dicho que algo viene de algo", al describir el desarrollo de un universo que funciona en la base de leyes como la gravedad.

Históricamente, muchos teólogos cristianos, así como filósofos no cristianos, han argumentado precisamente lo contrario del punto de Hawking: las leyes de la física sólo pueden ser atribuidas a un creador infinito, inteligente y no físico.

El "dios" de Hawking

El jesuita Guy Consolmagno, astrónomo del Observatorio del Vaticano, explicó a Catholic News Agency que las condiciones previas del universo en despliegue y sus operaciones no pueden ser una forma de "nada", como Hawking considera, sino condiciones creadas por Dios para el ordenamiento del mundo.

"Dios es la razón por la cual el espacio y el tiempo y las leyes de la naturaleza confluyen en las fuerzas de operación de las que habla Stephen Hawking", señaló.

Para Consolmagno, el desprecio de Hawking hacia Dios se basa no sólo en su denominación errónea de las leyes físicas como "nada", sino también en su falta de comprensión de la noción de trascendencia de Dios. Por lo tanto, Hawking realmente ha descartado un tipo de "dios" en el que los cristianos no creen.

"El 'dios' en el que Stephen Hawking no cree, es el mismo en el que yo no creo. Dios no es sólo otra fuerza en el universo, junto con la gravedad o la electricidad. Dios no es una fuerza a ser invocada para llenar los vacíos de nuestro conocimiento", agrega el experto.

Consolmagno recuerda que "Dios es la razón por la cual la existencia misma existe".

Para el Padre Spitzer, Hawking admite este profundo misterio en el mismo momento en que trata de desestimarlo.

"En mi opinión, el Dr. Hawking no ha demostrado aún que esta realidad no sea necesaria. De hecho, lo implica al considerar la existencia de un inicio en su afirmación sobre el universo que proviene de la nada", concluye Spitzer.

sábado, 28 de agosto de 2010

Argentina: Los niños son injustamente discriminados

Mensaje de los obispos de San Luis


BUENOS AIRES, sábado, 28 de agosto de 2010 (ZENIT.org).- En la solemnidad de San Luis Rey, los obispos puntanos, en Argentina, han emitido una declaración en la que denuncian la injusta discriminación de la que son objeto los niños y reclaman la urgente defensa de sus derechos.



MENSAJE A TODO EL PUEBLO DE SAN LUIS Y DE LA PATRIA

Por el camino de la injusta discriminación contra el niño,

se propone el asesinato del niño



Dirigimos este mensaje a todos los fieles católicos, y a todo el pueblo de San Luis y de la Patria. Nos dirigimos así a los fieles de los cultos evangélicos, con quienes nos hemos unido ante los mismos desafíos. Nos dirigimos a los fieles de los restantes cultos, y también a quienes sin profesar ningún culto, creen en la realidad de la naturaleza humana y en la defensa de sus derechos.

I). Hoy, es urgente defender los derechos de los niños. Ellos, por su naturaleza humana, tienen como derecho primero y fundamental el derecho a nacer, el derecho a la vida. Si eso se les niega, pierden todos los demás derechos. Si un niño indefenso e inocente es asesinado antes de nacer, sufre la más terrible e injusta de las discriminaciones. Se le niega todo.

Cuando se rechaza esta verdad, evidente para la inteligencia que caracteriza a nuestra naturaleza humana, se construye una sociedad inhumana. Frente a la cultura de la vida, se elige la cultura de la muerte. Se elige la cultura de la promoción legal del aborto.

Se intenta justificar esa cultura mortífera, invocando el peligro de los abortos clandestinos. No hay cifras seguras pero se estima que podría llegar a morir una madre cada cuatro mil abortos clandestinos[1]. Pero la absurda "solución" es asesinar a esos cuatro mil niños, con cuidados médicos seguros, legales y gratuitos a sus madres, para que no sufran peligro.

Por supuesto, no se utilizará la chocante palabra "asesinar". Se dirá que solo se trata de una "interrupción del embarazo". Pero serán vidas definitivamente interrumpidas.

Otro subterfugio es presentar este tema -no como una cuestión de vida o muerte en que podrían llegar a alterarse básicos principios constitucionales- sino como un mero trámite burocrático en que por una interpretación "amplia" del Código Penal, se daría curso a una Guía Ministerial de máximo permisivismo abortista. Por ahora, la conciencia del principal responsable lo ha impedido.

No es posible creer que en sociedades modernas y desarrolladas no existan posibilidades legales para un trámite de justa y rápida adopción. Ni tampoco, que se carezca de posibilidades para brindar a esas madres el apoyo social, económico, psicológico, moral y espiritual que necesitan, para no ser cómplices de la muerte de sus hijos. Todo eso es posible. Pero es rechazado por el terrible desprecio discriminatorio hacia el niño por nacer.

II). Iniciando el camino de esa injusta discriminación contra el niño, una escasa mayoría de legisladores argentinos -mayoría obtenida a través de intensas presiones- ha aprobado una injusta ley sobre la cual nuestro pueblo no fue consultado en las plataformas electorales previas, ni tampoco después. Nos referimos a la ley por la cual las uniones del mismo sexo han pasado a considerarse idénticas a las uniones matrimoniales del varón y la mujer. Es una ley contraria a la realidad de la naturaleza humana, que sólo puede realizarse en una verdadera familia, a través de la diferencia y la complementariedad de la unión entre los dos sexos. Si no hubiera sido siempre así, habría dejado de existir la especie humana.

Se pretendió que de esa manera se superaba una discriminación, cuando solo se estaba negando la realidad. Sobre esa base falsa se perpetraron entonces injustas discriminaciones.

Así, se discriminó injustamente al niño, negándole su derecho natural a tener un papá y una mamá, sostén natural indispensable para que tanto los varones como las nenas puedan desarrollarse normalmente en su propia identidad sexual.

Las consecuencias negativas de la ley alcanzarán su mayor gravedad en todo el ciclo escolar, inicial, primario y secundario. Allí se ha planificado que todos los alumnos se inicien en la llamada "perspectiva de género", de un modo que inevitablemente los inducirá a cuestionarse la identidad sexual de la cual en su inmensa mayoría se sienten naturalmente seguros. Dicha inmensa mayoría habrá sufrido y sufrirá, entonces, una injusta discriminación. No se respetarán sus derechos a ser sostenidos en esa natural identidad sexual.

Hoy, los activistas que promueven la cultura del aborto en la Argentina, son los mismos, o están estrechamente coordinados, con los que promovieron el matrimonio homosexual, y procuran extender sus efectos a toda la sociedad en lo educativo y cultural.

Se trata de un proyecto globalizado, cuyo núcleo central se vincula indudablemente a sectores de las Naciones Unidas. En nombre de la lucha contra la discriminación, despliegan la discriminación más activa e injusta contra quienes creen que Dios es "fuente de toda razón y justicia", y viven sostenidos por esa fe.

La Iglesia confía en que Cristo seguirá guiándola e iluminándola, para que comprenda en la esperanza estos signos de los tiempos, y sin desanimarse nunca transmita el testimonio de la verdad en el amor, que es su misión.

San Luis, 25 de agosto de 2010

Solemnidad de San Luis Rey

+Mons. Jorge Luis Lona

Obispo Diócesis de San Luis

+Mons. Pedro Daniel Martínez

Obispo Coadjutor Diócesis de San Luis

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[1] En un Editorial de "La Nación" (15/08/10), se cita una cifra de 80 muertes cada 460.000 abortos clandestinos, es decir, una muerte cada 5750 abortos

domingo, 22 de agosto de 2010

La religión desarma el odio y la violencia


Investigación de un escritor judío


ROMA, domingo, 22 de agosto de 2010 (ZENIT.org).-

Según muchos de los nuevos ateos que han atacado de modo vociferante a Dios y a la religión en los últimos años, la religión no sólo es enojosa sino también dañina y mala. Muchos de ellos acusan a la religión de ser propagadora de divisiones, odio y violencia.

No es verdad, replicaba David Brog en su libro "In Defense of Faith: The Judeo-Christian Idea and the Struggle for Humanity" (En Defensa de la Fe: La Idea Judeo-Cristiana y la Lucha por la Humanidad, Encounter Books). Brog es un escritor judío y director de Christians United for Israel. La tradición judeocristiana ha sido el antídoto más eficaz de Occidente a las peligrosas tendencias de la naturaleza humana que propician la violencia, sostenía.

Sí, hubo épocas en el pasado en las que la fe tendía hacia la intolerancia, pero debemos ver más allá de algunas imperfecciones de nuestra tradición religiosa y reconocer los muchos beneficios de nuestra herencia espiritual, explicaba Brog. No somos buenos simplemente por nacer, observaba, y en el pasado la mayoría de la gente estaba dividida en tribus, razas y naciones, cada una enfrentada a las otras. El cambio radical que trajo la tradición judeo cristiana, apuntaba, es la idea de que todos los seres humanos están creados a imagen de Dios y que estamos llamados a amar a todos nuestros prójimos sin excepción.

Brog llama a esto la "idea judeocristiana" y decía que esto no sólo fue una innovación en Occidente, sino que sigue inspirando nuestra más alta ética hasta nuestra época.

La compasión que sentimos por la víctima de un terremoto en Haití, o por una víctima del sida en África, es un altruismo que es excepcional en la historia humana, y tenemos que agradecérselo a la tradición judeo cristiana, añadía.

Cruzadas e Inquisición

Uno de los capítulos del libro está dedicado a lo que Brog considera mitos sobre atrocidades. Trata sobre todo de las cruzadas y de la inquisición española, tema que surge casi de modo inevitable cuanto se ataca al cristianismo. Es cierto que en ambos episodios históricos se vieron atrocidades, pero Brog mantiene que es necesario que consideremos lo que ocurrió en la perspectiva correcta.

Las cruzadas tuvieron lugar en una era de continua guerra entre las potencias cristianas y musulmanas. Durante estos conflictos los musulmanes eran normalmente los agresores, y también en la mayor parte de las veces los vencedores. Por eso, sostiene Brog, es incorrecto pintar a los cruzados como una especie de sangrientos e intolerantes cristianos. Más bien se trató de uno de los asaltos en el conflicto entre dos civilizaciones. Las fuerzas cristianas llevaron a cabo atrocidades durante las cruzadas pero, argumenta Brog, los líderes de la Iglesia estuvieron en la vanguardia a la hora de intentar parar la violencia injustificada.

En cuanto a la inquisición, Brog explicaba que, lejos de ser la fuerza impulsora tras una especie de persecución violenta, la Iglesia fue a menudo más una barrera que superar y un freno a los excesos.

Es verdad que el Papa Sixto IV publicó en 1478 la bula que autorizaba la inquisición española, pero Brog continuaba con su defensa diciendo que tan pronto como el Vaticano supo de los excesos de la inquisición intervino para intentar pararlos. Varios Papas en los años siguientes continuaron adoptando medidas para contener a la inquisición, añadía.

Al concluir esta sección del libro, Brog afirmaba que la Iglesia católica no era la fuerza que impulsaba la violencia antisemita de las cruzadas o de la inquisición, sino que por el contrario había buscado limitar tal violencia. De esta forma, estos dos episodios no prueban que la religión sea una fuente de conflictos humanos. No obstante, advertía, revelan la necesidad de estar vigilantes a fin de que la fe no se corrompa por la naturaleza humana dañada.

Vida humana

Uno de los capítulos del libro examina el tema de la santidad de la vida humana. Brog comparaba esto con la práctica común del infanticidio en el Imperio Romano. El código legal romano permitía matar a cualquier niño varón deforme o débil o a cualquier niña, sin importar si eran sanos o no. Tanto judíos como cristianos se oponían con fuerza a esto y afirmaban que no era lícito matar a un inocente. Brog sostiene que la única razón por la que hoy en Occidente reconocemos la santidad y la igualdad de todos los seres humanos se debe a la herencia judeo cristiana.

"La mayoría de las civilizaciones a través de la mayor parte de la historia humana nunca llegaron a esta visión", añadía.

Si algún filósofo del iluminismo hubiera acogido y abrazado este concepto de la santidad de la vida humana difícilmente habría podido acreditar que hacía una aportación original al hacerlo, sostenía Brog, puesto que la idea viene directamente de la Biblia que la mayoría de ellos habían leído.

El peligro hoy, afirmaba, es que la ciencia está saltándose la pared entre los seres humanos y el reino animal, y trata al hombre como sólo un animal. Se nos advierte con frecuencia sobre el peligro de que la religión se introduzca en campos que no le competen, observaba Brog, pero cuando se trata de la moralidad es necesario que la ciencia respete su falta de competencia.

"Cuando la ciencia se aventura más allá de sus áreas de interés en el reino de la moralidad, suele dejar cadáveres a su paso", advertía Brog.

La misma advertencia se aplica a la filosofía, continuaba Brog. Aunque todos nos hemos beneficiado de la tradición clásica y de los filósofos de la Ilustración, hay límites a lo que la filosofía nos puede enseñar.

La tradición judeo cristiana atribuye a los seres humanos un valor que va más allá de sus capacidades y aportaciones individuales. Y argumentaba que desgraciadamente la filosofía laica ha intentado muchas veces quebrar esta situación y someternos a sistemas de evaluación bastante menos benignos.

Entre los peligros que enumeraba Brog estaba la eugenesia, popular en los años veinte y treinta, que justificaba la esterilización de las personas consideradas inferiores, sancionada como práctica legítima nada menos que por el Tribunal Supremo de los Estados Unidos. Para que no pensemos que esto es sólo una singularidad histórica, Brog apuntaba que hoy hay filósofos, como Peter Singer, que están a favor del infanticidio y la eutanasia.

Genes egoístas

El capítulo titulado "Trascender nuestros Genes Egoístas" está dedicado a mostrar cómo ambas religiones, la judía y la cristiana dan una gran importancia al amor a los demás. Esto se basa en lo escrito en el primer capítulo del primer libro de la Biblia, en el Génesis, en donde se dice que Dios creó al hombre a su propia imagen. Esta puede muy bien ser la idea más revolucionarias de toda la historia humana, aseveraba Brog.

Creer esto implica aceptar que estamos investidos de un valor por encima de todos los demás seres creados y este es el fundamento de todos los derechos humanos. No sólo establece el valor supremo de cada vida humana, sino que también afirma la igualdad de todos los seres humanos.

En una interesante sección, Brog explicaba que el amor a los demás está en el centro de tradición judía, rechazando la idea de que en tiempos de Jesús el judaísmo se había reducido a la observancia de unas leyes y rituales fríos.

Hay, sin embargo, diferencias significativas entre el cristianismo y el judaísmo, admitía. Con todo, dejando a un lado las muchas cuestiones teológicas que separan a ambos, cuando se llega a la cuestión de la moralidad hay una marcada afinidad, comentaba Brog.

Como el judaísmo, el cristianismo pone hincapié en la necesidad de actuar en nombre del amor que predica. Además, observaba el autor, el ejemplo último de amor en acción es la crucifixión de Jesús.

Volviendo al día de hoy, comentaba que el hecho de que el Papa Benedicto XVI escogiera para su primera encíclica el tema del amor era muy significativo.

Podemos discrepar sobre si hay un Dios pero, observaba Brog, no podemos negar que la tradición judeocristiana ha sido el medio primario por el hemos podido lograr avances éticos. Rechazar la religión sólo llevará a un aumento del sufrimiento humano y del mal.

Por el padre John Flynn, L. C., traducción de Justo Amado