sábado, 25 de enero de 2014

Pier Paolo Pasolini: comunista, homosexual, ateo... y firme contra la legalización del aborto

El poeta y cineasta italiano Pier Paolo Pasolini estaba muy lejos de cualquier posición conservadora o clerical pero entre 1973 y 1975, en sus artículos de Il Corriere della Sera, en su columna "Escritos corsarios" se manifestó con contundencia contra la legalización del aborto.

Él era firmemente ateo, declaradamente homosexual y militantemente comunista, pero ninguno de estos colectivos hoy se sentiría a gusto con sus posturas. Era homosexual y promiscuo pero evitaba el submundo gay; era comunista pero heterodoxo y le expulsaron del partido; era ateo, pero como poeta y artista no podía no ver lo sagrado en la vida y la existencia, y su "Pasión según San Mateo" obtuvo premios cinematográficos católicos (por su sensibilidad, no por su teología).



Pasolini se enfrentó a su entorno de la izquierda radical cuando éste planteó la legalización del aborto en Italia.

"Estoy traumatizado con la legalización del aborto porque, como muchos, la considero como una legalización del homicidio", escribió en Il Corriere della Sera.

Más allá de los partidos

 
Frente a las consignas simplonas de la izquierda y su visión del mundo en dos bandos, Pasolini escribió: "el contexto en el que hay que considerar el problema del aborto es mucho más amplio y va mucho más allá de la ideología de partidos".

Por un lado, el artista apelaba a argumentos de ecología humana: "la tragedia demográfica es la que, en un horizonte ecológico, se presenta como la más grave amenaza para la supervivencia de la humanidad. [...] Antes, todo hijo que nacía era bendito por ser garantía de vida; por el contrario, todo hijo que nace hoy es una contribución a la autodestrucción de la humanidad y por lo tanto es maldito ", escribió. Así denunciaba la visión antivida de los acomodados de su época.

Y añadía: "los extremistas a ultranza del aborto [...] hablan del aborto como refiriéndose a una tragedia femenina, en la que la mujer está sola con su terrible problema, como si en ese momento el mundo la hubiera abandonado. Comprendo. Pero podría añadirse que cuando la mujer estaba en la cama no estaba sola".



El carácter sagrado de la vida

 
Como poeta y artista, él veía que el aborto rompía algo especialmente valioso y sagrado. Usaba la palabra "hierofanía" que había leído en los textos de Mircea Elíade: "manifestación de lo sagrado".

"Debido a mi sentimiento profundo de hierofanía, del carácter sagrado de todas las cosas –una cierta visión gnóstica que tengo del mundo- me repugna ver destruido el orden principal de la vida", denunciaba Passolini.

Y concluía en uno de sus artículos: "¿se puede tranquilamente pasar por encima de un caso de conciencia personal con relación a la decisión de hacer venir o no al mundo a alguien que quiere decididamente venir?

Con los niños no queridos

 
Como tantos otros chicos sensibles y heridos que llegarían a desarrollar sentimientos homosexuales, Pasolini había vivido una infancia apegado a su madre y asustado o rechazado por su padre. La sensación de "niño no querido" era fuerte en él, y le dolía que se generase una sociedad que no quería a los niños, que los mataba.

Incluso en su obra final, "Salo o los 120 días de Sodoma", un transgresor y agresivo estudio del sadismo en los días finales del fascismo italiano, aparecen las figuras de niños utilizados y despreciados. Pero todo ese mal en el mundo no era excusa, según él, para justificar el aborto.

"Pasolini argumentaba contra la liberalización de la ley del aborto porque sacrificar la procreación al placer era una forma de americanizar el sexo, convertirlo en una diversión", escribía en 1982 Edmund White en el New York Times.

Aborto: lo más brutal y enfermizo

 
Sobre el tema escribía también Sam Rohdie en su biografía "The Passion of Pier Paolo Pasolini": "El aborto, creo, simbolizaba para Pasolini todo lo que había de brutal y enfermizo en el capitalismo moderno. [...] Para Pasolini la legalización del aborto constituía la inversión de los valores de la sociedad anterior, la de antes del consumismo, cuando los nacimientos eran un gozo y una ´festa´ [en italiano], cuando la naturaleza era asombrosa y sagrada, no como ahora, dijo, funcional y calculada. El aborto tenía una racionalidad loca. La sociedad asesinaba a sus nonatos para mantenerse. Lo que mataba era, en todos los sentidos, lo real, la realidad. Lo que ocurría en las clínicas estaba ocurriendo en la sociedad en general. Lo real era destruido en nombre de las razones del consumismo, no por humanidad".

Pasolini, tan radical como contradictorio, murió en el contexto del sexo comercializado que él sabía que era tan deshumanizador: le mató en 1975 un prostituto de 17 años al que recogió en la estación central de Roma y llevó a la playa a Ostia, el puerto romano. El artista tenía 53 años. Las circunstancias exactas aún son motivo de conjeturas. 


 P.J.Ginés/ReL

sábado, 11 de enero de 2014

Conozca las 10 frases de la Biblia más compartidas por móvil: son las que sirven para dar ánimos

YouVersion (www.bible.com/es) es una aplicación sobre la Biblia para dispositivos móviles que se ha instalado ya 123 millones de veces en tablets, iPhones, iPad, Blackberrys y otros aparatos portátiles de comunicación en todo el mundo. Ilustra en qué medida las nuevas tecnologías se integran en la vida cristiana y de oración.

Con motivo del balance anual de 2013 (año en que la aplicación se ha instalado 49 millones de veces y sus usuarios han compartido y reenviado 68 millones de versículos) la plataforma ha elaborado una serie de listas con las frases y capítulos bíblicos que tienen más "éxito"

Los 10 versículos más compartidos
Una cosa es marcar digitalmente los versículos que a uno le sirven, extrañan o edifican, y otra distinta es enviarlos a conocidos.

La estadística muestra que casi todos los versículos en el ránking de "los más compartidos" son frases de ánimo, exhortación, consuelo y coraje, con un par  de excepciones curiosas: el más compartido es el Salmo 118,24, una frase de celebración y victoria, y en séptima posición encontramos el famoso "Maridos, amad a vuestras mujeres" de San Pablo. (En cambio, la petición paralela de "esposas, someteos a vuestros maridos", parece no se reenvía mucho).

Y así los más compartidos son

1. Este es el día que hizo el Señor: alegrémonos y regocijémonos en él. (Salmos, 118: 24)

2. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte a su debido tiempo. (Pd. 5, 6)

3. No temas, porque yo estoy contigo; no te angusties, porque yo soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; te sostendré con mi diestra. (Is. 41, 10)

4. Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. (Mt. 7, 7)

5. Los que esperan en el Señor renovarán sus fuerzas; se remontarán con alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán (Is. 40, 31)

6. No tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino Uno que ha sido tentado en todo como nosotros, pero sin pecado. (Heb. 4, 15)

7. Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra. (Ef. 5, 25-26)

8. Te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Yahvé tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas (Js. 1, 9)

9. No nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio (2. Tim. 1, 7)

10. El Señor es mi roca, mi baluarte y mi libertador; mi Dios, mi roca en quien me refugio; mi escudo y el cuerno de mi salvación, mi altura inexpugnable. (Salmos 18, 2)



Los 5 versículos más populares
La tabla de los más populares se refiere a los más marcados, votados, usados... Es un criterio distinto, pero de nuevo nos encontramos con versículos de superación, de ánimo y esfuerzo, a veces de consuelo en el esfuerzo.  

Esta es la lista de los 5 más populares:

1. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece (Fil. 4, 13)

2. Pero los que esperan en el Señor renovarán sus fuerzas; se remontarán con alas como las águilas, correrán y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán (Is. 40, 31)

3. Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre jamás. Amén. (Mt. 6, 13)

4. Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Yahvé tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas (Js. 1, 9)

5. Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias (Fil. 4, 6)



Capítulos más leídos
Y los 5 capítulos más leídos (o, quizá en realidad, más estudiados, los que requieren una lectura sosegada) por los usuarios son estos:

1. Romanos 8
(sobre la idea de que la carne mata, el espíritu da vida, con Dios somos más que vencedores)

2. Romanos 12 (indicaciones para la vida cristiana: "renovad vuestra mente, conoced a Dios, aborreced lo malo...")

3. Mateo 5 (las Bienaventuranzas)

4. Juan 4 (Jesús y la samaritana junto al pozo)

5. Hebreos 12 ("Una nube de testigos nos contempla", "Dios nos trata como hijos", "nuestro Dios es un fuego consumidor").

YouVersion permite elegir entre cientos de versiones de la Biblia, compararlas de dos en dos, resaltar con colores los versículos, compartirlos, crear notas e incluso suscribirse a los planes de lectura.

A modo de resumen de estas estadísticas, hay un "versículo del año" que es el que mayor puntuación conjunta ha logrado en las categorías de "favoritos", "compartidos" y marcados.

Y el "vencedor final" es este:

«Todo lo puedo en Cristo que me fortalece» (Fil. 4, 13)

Resultados de cristianos "maduros"
La aplicación recoge lo que hacen sus usuarios con ella, que son -por definición- personas de fe y vida cristiana, que buscan apoyo en la Palabra para perseverar. Tiene un elemento "práctico" y cotidiano muy claro.

Debido a eso, no consiguen subir mucho en el ránking los versículos e ideas que se usan más en ambientes menos formados en la vida bíblica o los que se usan para evangelizar personas alejadas de la fe, para suscitar un primer enamoramiento de Dios (el kerigma, "Dios te ama", el hijo pródigo, etc...)
 
 ReL

domingo, 5 de enero de 2014

Los Magos, anuncian y preguntan, creen y buscan. San Agustin

Estamos en las vísperas de la Epifanía del Señor. Los Magos de Oriente adoran al Señoryle ofrecen sus presentes. El episodio evangélico no tiene desperdicio, tal como podemos leer en el siguiente pasaje de San Agustín:

Pero hoy hemos de hablar de aquellos a quienes la fe condujo a Cristo desde tierras lejanas. Llegaron y preguntaron por él, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Hemos visto su estrella en el oriente y venimos a adorarlo. Anuncian y preguntan, creen y buscan, como simbolizando a quienes caminan en la fe y desean la realidad. ¿No habían nacido ya anteriormente en Judea otros reyes de los judíos? ¿Qué significa el que éste sea reconocido por unos extranjeros en el cielo y sea buscado en la tierra, que brille en lo alto y esté oculto en lo humilde? Los magos ven la estrella en oriente y comprenden que ha nacido un rey en Judea. ¿Quién es este rey tan pequeño y tan grande, que aún no habla en la tierra y ya publica sus decretos en el cielo? Sin embargo, pensando en nosotros, que deseaba que le conociésemos por sus escrituras santas, quiso que también los magos, a quienes había dado tan inequívoca señal en el cielo y a cuyos corazones había revelado su nacimiento en Judea, creyesen lo que sus profetas habían hablado de Él. Buscando la ciudad en que había nacido el que deseaban ver y adorar, se vieron precisados a preguntar a los príncipes de los sacerdotes; de esta manera, con el testimonio de la Escritura, que llevaban en la boca, pero no en el corazón, los judíos, aunque infieles, dieron respuesta a los creyentes respecto a la gracia de la fe. Aunque mentirosos por sí mismos, dijeron la verdad en contra suya. ¿Era mucho pedir que acompañasen a quienes buscaban a Cristo cuando les oyeron decir que, tras haber visto la estrella, venían ansiosos a adorarlo(San Agustín. Sermón 199, 2)

En la Epifanía celebramos la manifestación de Dios en la tierra; entre nosotros. ¿Qué pensaríamos si una persona se plantara ante nosotros y nos dijera a la cara que él era dios? Seguramente le tomaríamos por un bromista o por un loco. ¿Qué pensaríamos si Dios se manifestara ante nuestros ojos en la figura de un niño que reposa en un pobre comedero de animales, en una ciudad perdida de un lejano país? ¿Nos arrodillaríamos para adorarle? ¿Le entregaríamos los tesoros que traíamos para el rey de Israel?

Los Magos de Oriente no eran personas normales. Salieron de sus países por causa de una señal en el cielo que les habló de lo que iba a suceder. Embarcarse en un viaje así requiere mucho amor, esperanza y fe. Arrodillarse y adorar a un niño tendido en un comedero de animales, requiere una visión inmensa sobrenatural.

Pensemos en los pastores, que fueron convocados por un Ángel. Dejaron sus rebaños en el campo y se acercaron al portal, atendiendo al anuncio que se les entregó. Los pastores eran personas pobres y no muy bien vistas por la sociedad de su tiempo, pero fueron los primeros convocados para adorar al Señor. Los Magos de Oriente tampoco fueron especialmente bien recibidos en Judea. Pensemos en la desconfianza que tuvo que producir que un grupo de extranjeros vinieran a “descubrir” lo que los judíos pensaban que era de su propiedad. Además, no vinieron a partir de las profecías sino a partir de la ciencia de los cielos. ¿Puede haber algo más sospechoso que una persona que se guía por la ciencia y el razonamiento para acercarse a Dios?

Si hoy en día, un científico dice que su fe parte de sus estudios científicos, seguramente todos lo miraríamos de reojo. Desconfiamos que la ciencia conduzca hacia Dios, aunque existen muchos testimonios en ese sentido. Desconfiamos de la revelación natural, porque creemos en un dios alejado y desentendido de nosotros. No podemos imaginar que Dios se manifieste y se comunique con nosotros a través de su propia creación.

Pero hay algo más que resalta en el pasaje de la adoración de los Magos de Oriente: los presentes que ofrecieron: oro, incienso y mirra. Presentes que podrían ser rechazados por ser demasiado “ricos”, pero que no lo fueron. Cada cual aporta al Señor según los talentos que Dios les ha dado y lo hace con total humildad. No se trata de sopesar la humildad por las apariencias, sino por el corazón que se abre y comparte sus dones.

Nadie dudó de la humildad de los Magos de Oriente, por muy espléndidas vestiduras y presentes que trajesen consigo. Nadie desconfió de la humildad de la Sagrada Familia que los aceptó como un don providencial. Después les servirían para ponerse a salvo en Egipto. Dios se vale de simbolismo para enseñarnos y mostrarnos su Voluntad. Hoy en día despreciamos el simbolismo porque  pensamos que es algo antiguo que no tiene relación con la realidad que vivimos. Algo similar a lo que le pasó a Herodes cuando los Magos le dijeron que leyeron los signos en el cielo. Tendemos a ver en los símbolos las apariencias externas y nos olvidamos que lo importante es lo que se revela a través de ellos.

¿Qué pensaríamos de una familia sencilla que recibe oro, incienso y mirra de unos elegantes señores extranjeros? Seguramente pensaríamos en que el oro significa riqueza y les señalaríamos como cómplices del sistema económico imperante. Si vemos el incienso y la mirra, pensaríamos en que su fabricación conlleva injusticias sociales en donde fueron recogidos. Terminaríamos por desconfiar de la familia que acepta unos regalos que los hacen “ricos” y diferentes de las demás. Todo lo que ponga en cuestión la igualdad en la mediocridad, atenta a nuestra soberbia y enciende nuestra envidia. Pero todos estos razonamientos parten únicamente de las apariencias externas. Las apariencias que tanto valoramos y que marketing emplea con tanta eficacia con nosotros. Lo triste es que olvidamos que detrás de las apariencias existe un lenguaje simbólico. Si olvidamos este lenguaje perdemos el 99% de la revelación de Dios. Dios que se manifiesta de forma indirecta y personal a través de este maravilloso lenguaje.

Quizás dentro de poco, seamos incapaces de entender el relato de la adoración de los Magos. A lo mejor ya somos incapaces y por eso hay que leerlo rápido, flojito y no comentar nada que sea políticamente incorrecto.

Tendríamos que intentar ser como los Magos de Oriente: “los magos, a quienes había dado tan inequívoca señal en el cielo y a cuyos corazones había revelado su nacimiento”, para ser capaces de leer lo que Dios nos dice a cada uno de nosotros a través del oído que tenemos en nuestro corazón. Solía decir Cristo “…quien tenga oídos que oiga

¿Cómo se revela Dios hoy en día a cada uno de nosotros? ¿Es Dios un dios lejano, sin voz? ¿Nuestra fe es cada día más socio-política y menos un sobrenatural? A lo mejor es que tenemos cerrados nuestros corazones con el candado de la ideología y el lenguaje simbólico nos parece incomprensible y hasta rechazable.


Nuestra sociedad, como la sociedad judía del siglo I, no está dispuesta a escuchar ni a seguir lo que Dios habla en nuestro corazón. ¿Era mucho pedir que acompañasen a quienes buscaban a Cristo cuando les oyeron decir que, tras haber visto la estrella, venían ansiosos a adorarlo? Hoy en día sigue siendo mucho pedir.


Néstor Mora Núñez