sábado, 14 de diciembre de 2019

Economía sanitaria y atención a los enfermos

Humanizar la atención a los enfermos será de gran beneficio para todos.

Por: P. Fernando Pascual, LC | Fuente: Catholic.net



Hablar de economía sanitaria exige un buen nivel de competencia, pero casi todos podemos constatar, desde la experiencia de la gente, cómo afecta a la vida de las personas.
Porque según se organice la administración pública de un modo o de otro respecto de los gastos médicos, será posible recibir una mejor atención sanitaria, o encontrarse con la triste sorpresa de que no hay ni medicinas ni camas de hospital para uno mismo o para algún familiar o conocido.
Por lo mismo, la atención a la economía sanitaria afecta a todos. Si las autoridades organizan modos eficaces de usar los recursos, si saben obtener fondos sin graves daños a la sociedad, si tienen ante los ojos las necesidades concretas de la gente, habrá mejoras que beneficiarán a muchos.
No a todos, hay que decirlo, pues los recursos son siempre limitados. Por más dinero que se invierta en hospitales, en investigación, en universidades, nunca habrá suficientes atenciones para todos, especialmente en casos de enfermedades raras que exigen muchos recursos para pocas personas.
Reconocer el límite de los recursos (materiales y humanos) no significa abandonar a algunos a su suerte. No se podrá ofrecer lo mejor para todos, pero casi siempre será posible facilitar el acceso a apoyos que alivien el sufrimiento de aquellos enfermos para los que no existan tratamientos curativos.

En un mundo donde existe el peligro de caer en el eficientismo y en la obsesión por hacer que cuadren las cuentas (y hay que hacer que cuadren), todo lo que promovamos para humanizar la atención a los enfermos será de gran beneficio para todos.
La economía sanitaria, ciertamente, no enseña con qué cariño atender a un enfermo que no se vale por sí mismo, pero sí debe estar atenta para que se invierta en curas paliativas y en formación especialística que permita a casi todos el acceso a tratamientos que alivien y acompañen a quienes necesitan más cuidados.
Con buenos administradores y con gobernantes atentos a las necesidades sanitarias de la gente, los operadores sanitarios tendrán a su mano recursos y apoyos que emplearán, así lo esperamos, para el mejor bien de los pacientes, sobre todo de aquellos más necesitados de atenciones médicas y de afecto terapéutico.

No hay comentarios: