Así como a los participantes en el Encuentro Mundial del 13 al 18 de enero
CIUDAD DEL VATICANO, domingo, 11 de enero de 2009 (ZENIT.org).-
Benedicto XVI ha establecido que puedan alcanzar la indulgencia plenaria los participantes en el VI Encuentro Mundial de las Familias, así como las familias que, al no poder estar presentes, se unan al acontecimiento en oración.
Así lo explica un decreto de emitido por
El documento, firmado por el cardenal James Francis Stafford, penitenciario mayor, y por el obispo Gianfranco Girotti, o.f.m. Conv., anuncia que "el Santo Padre concede a los fieles la indulgencia plenaria, que debe alcanzarse con las condiciones acostumbradas (confesión sacramental, comunión eucarística y oración según las intenciones del mismo sumo pontífice), excluido cualquier apego al pecado, en los días en los que participarán devotamente al IV Encuentro Mundial de las Familias".
Por otra parte, sigue diciendo, "los fieles que, verdaderamente arrepentidos, no puedan participar en este evento, alcanzarán la indulgencia plenaria, con las mismas condiciones, si, unidos en espíritu y pensamiento a los fieles presentes en la Ciudad de México, recitan en familia el Padrenuestro, el Credo, y otras oraciones para invocar de
El documento subraya la importancia decisiva que este Encuentro tiene para la Iglesia, pues de la familia depende la educación espiritual y moral de las futuras generaciones.
El documento vaticano espera que la cita de México "infunda en las familias cristianas la fuerza para transmitir santamente a las futuras generaciones los rectos principios de conciencia que deben ser cultivados con la ayuda de la gracia de Dios".
El Código de derecho canónico (c. 992) y el Catecismo de la Iglesia católica (n. 1.471) explican que "la indulgencia es la remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados, en cuanto a la culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas condiciones consigue por mediación de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, distribuye y aplica con autoridad el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los santos".
Creado por Juan Pablo II, el Encuentro Mundial de las Familias es una gran convocatoria que cada tres años hace el Papa para celebrar el don divino de la familia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario